"Esto significa que la amenaza está desde hace 3 generaciones"

Aunque fue corresponsal durante varios años en diferentes países árabes, la periodista del canal Euronews, Carla Fibla vive en Lyon. Se trata de una de las más destacadas expertas de la explosiva situación que se vive en Oriente Próximo.

La prensa en Europa fue unánime al calificar los atentados terroristas de París como un acto de guerra. ¿Esta ha empezado?

Ese es el problema. Las declaraciones de Françoise Hollande pero, sobre todo, las del primer ministro, Manuel Valls, apuntan en esa dirección pero son mensajes dirigidos a tranquilizar a una población atemorizada. Sin embargo, quien conoce un poco lo que está sucediendo en Oriente Próximo está escandalizado. Yo, por ejemplo.

¿Por qué?

Porque no sabemos el significado real del mensaje ni conocemos que piensan hacer para evitar que sucesos tan graves vuelvan a repetirse. ¿Enviar más tanques a Oriente Próximo? ¿Detener a todos los imanes del país sospechosos de alentar el radicalismo? ¿Volver a controlar las fronteras? ¿No admitir refugiados sirios? Es evidente que se debe reforzar la seguridad, y más aún tras escuchar el comunicado del Daesh (EI), pero estas medidas deberían ir acompañadas de políticas más constructivas destinadas a evitar el enfrentamiento social y fomentar la integración, algo en lo que Francia ha fracasado.

¿Es la falta de integración de miles de ciudadanos de origen musulmán que viven en la marginalidad una de las causas de que Francia se haya convertido en objetivo de los terroristas del EI?

Sin duda. Sabemos que quienes organizaron y participaron en los ataques eran franceses que crearon su infraestructura en Bélgica. Esto significa que la amenaza está desde hace 3 generaciones. Se trata de jóvenes que ni siquiera se sienten ciudadanos de segunda porque jamás han tenido la oportunidad de integrarse socialmente en Francia.
En una ocasión entrevisté al intelectual árabe ya fallecido Mohamed Arkoun, que fue asesor de Françoise Mitterrand en materia de integración, y su gran preocupación era la nula predisposición de los franceses para sacar adelante un verdadero proyecto de integración social en el país. Siento mucho decir que el viejo lema republicano de “Libertad, igualdad y fraternidad” no se aplica a todos los ciudadanos.
Hay quien ha comenzado a relacionar estos ataques con los refugiados sirios que han llegado a Europa. Parece como si otro objetivo premeditado de los terroristas fuese estimular la desconfianza de la sociedad civil europea hacia los refugiados.
Hay que ser muy honestos en un asunto tan grave y delicado. Especialmente cuando Europa comenzó a percibir ahora la magnitud del drama que se vive en Siria y en toda la región, donde potencias como EE.UU. y Rusia han entrado de lleno en el conflicto, y porque los terroristas no tienen ningún problema en involucrar a los refugiados para aumentar el miedo y el rechazo.

¿Hay solución a este drama que algunos empiezan a calificar de III Guerra Mundial?

Justo esta semana trabajé en una entrevista al rey de Jordania, Abdalá II, y hablaba abiertamente de una guerra global. La situación de Oriente Medio siempre fue difícil pero ahora se ha complicado. Ya no es solo el conflicto en Palestina. Están Siria, Irak, Líbano, la intervención de Arabia Saudí en Yemen con el apoyo de EE.UU. En Europa existe la posibilidad de exigir una serie de cambios a las autoridades en política internacional. (I)