En medio de la crisis política que vive el país, el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, disolvió el Parlamento y convocó a elecciones anticipadas para el 26 de octubre.

El mandatario señaló que la Constitución permite realizarlos porque la coalición de gobierno había caído hace semanas.

La decisión llega en medio de una crisis con Rusia por los rebeldes separatistas prorrusos que controlan partes del este de Ucrania.

Precisamente, el ejército ucraniano combate a un grupo de insurgentes que, asegura, ha cruzado la frontera desde Rusia con decenas de tanques y blindados en un intento por abrir un nuevo frente de batalla en una guerra que dura ya 5 meses.

La columna de rebeldes avanzó cerca del mar de Azov hacia Mariupol. Los combates se concentran hasta ahora en el norte y si los insurgentes logran tomar Mariupol y otros enclaves, podrían apoyar a sus colegas que combaten en los bastiones de Donetsk y Lugansk.

El canciller ruso, Serguéi Lavrov, anunció que Moscú planea enviar un segundo convoy con ayuda humanitaria al este de Ucrania. Hace una semana el envío de un cargamento de Rusia provocó una escalada de tensión entre ambos países.