El Papa pidió paz ante los conflictos del mundo y dio su bendición

Roma. EFE.- Mientras el mundo católico vivía intensamente la Semana Santa en diversos países del mundo, el tema del conflicto entre Corea del Norte y Sur preocupó al Papa Franciso, quien presentó su primer mensaje pascual como el líder de esta religión, ante unos 250 mil fieles desde el balcón de la basílica de San Pedro del Vaticano.

La veneración del Cristo Resucitado fue la forma en que el Papa introdujo el rito de rezar los santos misterios del Señor. A esta celebración se la conoce como “Resurrexit”.

Esta vez fue en latín que proclamó el Evangelio, para poder simplificar la ceremonia. Su deseo fue emitir rápidamente el mensaje que tenía para el mundo: La paz hacia todas las extensiones donde habitan los seres humanos.

Su llamado fue directamente con los países en conflicto. A Irak, donde israelíes y palestinos continúan sus discrepancias. Pidió por África, que es “escenario aún de conflictos sangrientos” , sobre todo por Mali “para que vuelva a encontrar la unidad y estabilidad”; solicitó paz también para República Democrática del Congo y por República Centroafricana.

Se refirió a Siria, por los refugiados que ahí se encuentran. Y  habló específicamente de Asia, sobre todo “en la península coreana, para que se superen las divergencias y “madure un renovado espíritu de reconciliación”. A este mensaje le agregó el pedido especial que le hizo a Pyongyang a quién sugirió que “evite errores de cálculo”, para evitar futuras catástrofes violentas.

Sin embargo, agregó a su discurso palabras positivas señalando que es de gran alegría anunciar que el amor de Dios puede transformar vidas “Jesús ha resucitado, hay esperanza para ti, ya no estás bajo el dominio del pecado, del mal. Ha vencido el amor, ha triunfado la misericordia”

Al final de su mensaje, impartió la bendición “Urbi et Orbi” a todo el mundo.