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Merkel anuncia más sanciones para atacantes
Alemanes rechazan en las calles agresiones a mujeres
‘No quiere decir no. Es nuestra ley. Manténganse lejos de nosotras’, decía uno de los carteles que portaban las manifestantes. ‘No a la violencia contra las mujeres en Colonia, tanto en la Fiesta de la Cerveza como en la alcoba’, decía otra de las pancartas. Se trataba de una protesta de centenares de mujeres en la escalinata de la catedral de Colonia (oeste alemán), contra agresiones en las fiestas de fin de año.
Las manifestantes rechazaron las violaciones que hubo en la última noche de 2015 en la plaza de la estación de trenes de Colonia. Tras los operativos se ha detenido a 31 personas, 18 de ellas son refugiadas y tenían pendiente regularizar su estatus en Alemania. Esto ha abierto el debate sobre la apertura alemana a los migrantes y también la xenofobia de una parte de la población. El número de denuncias subió a 379.
Para Bernd Riegert, analista de la cadena estatal alemana DW, el caso Colonia empeora la crisis de refugiados en la Unión Europea. “Muchos líderes consideran que la gestión de la canciller alemana en la crisis de refugiados es equivocada. Ángela Merkel tendrá que corregir su rumbo o irse”, escribe Riegert. El año pasado esta nación recibió 1,1 millones de demandantes de asilo. Por su parte, Merkel abogó ayer por endurecer las reglas de expulsión de los refugiados condenados, al afirmar que incluso quienes obtuvieron una suspensión de pena deberían partir de Alemania.
“Si un refugiado incumple las normas, tiene que haber consecuencias, esto significa que debe perder su derecho de residencia, independientemente de si tiene una suspensión de pena o una condena de cárcel”, dijo Merkel.
Ayer también se produjo otra manifestación en Colonia, esta vez de unos 1.500 extremistas de derecha quienes gritaban “Fuera Merkel”. El movimiento “Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente” (Pegida), creado en 2014 en la ciudad de Dresde (este), intenta aprovechar la emoción suscitada por las agresiones sexuales, en las que participaron refugiados, según las autoridades.
En una reunión en Maguncia, en el suroeste de Alemania, la dirección del partido conservador de la canciller, la CDU, acordó solicitar que la pérdida del derecho de asilo en Alemania sea más sistemática en caso de delito. Esta postura deberá ser debatida con el partido socialdemócrata SPD. Otros países como Polonia, República Checa, Hungría y Eslovaquia apoyan penas más fuertes para los refugiados que cometan crímenes. (I)