Ciudad de México.-

Funcionarios del Gobierno de México contabilizan las pérdidas económicas derivadas del sismo de magnitud 7.1 que ocurrió hace una semana y que provocó destrozos en la capital. Se estima que 500 inmuebles están en riesgo de colapsar.

La cifra de muertes aumentó ayer a 331, de las cuales 192 se registraron en la capital. Aunque las autoridades prometieron el regreso a la normalidad, las calles seguían bloqueadas por maquinaria de construcción y equipos de rescatistas que buscaban los cuerpos que aún permanecían bajo los escombros.

Treinta y ocho edificaciones, incluidos apartamentos y edificios de oficinas, colapsaron durante el sismo. El gobierno local anunció un plan de préstamos para la reconstrucción y ayuda a los que perdieron sus viviendas, o pueden perderlas a medida que avanza la demolición de inmuebles dañados. (I)