2.000 migrantes llegan al día a Macedonia

En la estación de Gevgelija, en la Antigua República Yugoslava de Macedonia, la policía intenta poner orden. Centenares de sirios taponan las vías del tren. Quieren llegar a Serbia.

Entrar en la estación significa un billete hacia la libertad y más si se logra subir al tren. Riyad trabajaba como informático en la ciudad siria de Kobani. Sentado en el vagón dice que quiere llegar a Alemania. Cree que en ese país, él y sus hijos tendrán un futuro mejor.

Amina y su marido huyeron también de Kobani. Su bebé nació hace 10 días en el trayecto cuando su lancha llegó a las islas griegas de Kos. “En mi país hay una guerra. Todo está destruido. Queremos ir a Alemania para construir una nueva vida”, cuenta.

La ciudad macedonia de Gevgelija nunca se queda vacía. De noche tirados en el suelo adultos y niños intentan conciliar el sueño. A diario 2.000 migrantes llegan a la estación. La mayoría proviene de Siria, llegaron a las islas griegas de Kos, quieren ir a Serbia y finalmente a Alemania.

Ante la masiva llegada de migrantes, Macedonia decretó ayer el estado de emergencia en las regiones fronterizas del sur y del norte y pidió ayuda porque no tiene trenes suficientes.

El gobierno macedonio también decidió desplegar soldados para ayudar a las autoridades locales en las zonas afectadas por la llegada de migrantes e instaló un cuartel general para gestionar la “crisis”.

Esos militares tendrán como objetivo reforzar la seguridad para la población local y atender a las personas que piden asilo, conforme las capacidades de las que dispone el país”, indica el comunicado.

Según cifras oficiales, más de 40.000 indocumentados llegaron a Macedonia en los dos últimos meses. Los medios locales apuntan a que al menos 1.500 de ellos se encuentran a la espera de poder atravesar el paso fronterizo de Eidomeni, entre Grecia y Macedonia.

Mientras, los gobiernos de Gran Bretaña y Francia anunciaron ayer la creación de un centro común de “comando y control” para luchar contra la migración clandestina en la localidad francesa de Calais.         

Entre las nuevas medidas se encuentra además un aumento del número de efectivos por parte de Francia y la construcción de una valla con financiación británica, así como la instalación de cámaras y otros equipos de seguridad.

Miles de inmigrantes residen en campamentos en Calais, con muchos de ellos intentando llegar a Reino Unido a través del Eurotúnel. Hasta la fecha se han registrado varias muertes en estos intentos.

En tanto, Médicos Sin Fronteras rescató con 3 barcos de salvamento a un total de 11.482 inmigrantes y refugiados en riesgo de morir ahogados en el mar Mediterráneo en los últimos 100 días, muchos de ellos con alta probabilidad de hundimiento de los botes en los que viajaban. (I)