“Las mujeres somos más del 50% de la población ecuatoriana y tenemos algo que decir”, enfatizó la investigadora y docente Palmira Chavero, durante el foro La imagen de las mujeres en los medios: barreras, oportunidades, avances y desafíos’, que se llevó a cabo el martes pasado en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) en Quito.

Durante el conversatorio la docente presentó uno de sus trabajos del año pasado que consistió en reunir a varios dirigentes de colectivos defensores de la igualdad de género y por medio de grupos focales preguntarles de qué manera se veían representados en los medios de comunicación y en la publicidad en el Ecuador.

Como resultado de aquella iniciativa se extrajeron 9 problemas fundamentales, sus causas y posibles soluciones. Las falencias de los medios de comunicación recaen en:

1. Roles y menores.- Las mujeres son asociadas a labores de casa y a la crianza de los hijos que a su vez son desvalorizados. Además son representadas como un solo colectivo con los mismos retos, necesidades y demandas.

2. Violencia y estereotipos.- Se relaciona a la mujer con la violencia y se la estereotipa. Los medios normalizan y perpetúan este tipo de hechos. Por ejemplo: la violencia intrafamiliar.

3 y 4. Invisibilización y negación a la legitimidad.- Las mujeres ocupan poco espacio en los medios. Se les consulta para temas de farándula o sociedad, pero no para política o economía, es decir que se deslegitima su autoridad para hablar de ciertos temas.

5. Cosificación y sexualización.- Se presenta a la mujer como un objeto prescindible y propiedad del hombre.

6 y 7. Sensacionalismo y formas punitivas.- Se culpa a la mujer de una situación y se elude el debate social que está detrás. Por ejemplo: si una mujer sale sola en la noche y la violan es su culpa cuando en realidad el problema es que en la ciudad no se puede estar sola en la calle. Es decir, es un problema de seguridad ciudadana.

8. Ausencia de temas de interés.- No se habla de los temas que le interesan a la mujer y cuando se habla de ellos se les da otro enfoque como en el tema de la violencia.

9. Enjuiciamiento a través del uso del lenguaje.- Los medios no solo tienen la capacidad de crear y sugerir imaginarios sociales sino de crear realidades. Por ejemplo: se enjuicia y se asocia el asesinato de una mujer como un crimen pasional. De esta manera incluso se lo justifica o normaliza. 

En el estudio también se identificó al rating y a la falencia formativa como algunas de las causas para que los medios y periodistas mantengan estas prácticas.

La investigación presentada por Chavero coincide con la del Grupo de Apoyo al Movimiento de Mujeres del Azuay (Gamma), a pesar de que esta fue realizada 5 años antes. La fundación Gamma formó parte del 4º proyecto del Grupo de Monitoreo Mundial de Medios (GMMP) y el 10 de noviembre de 2009 monitoreó a 4 estaciones de radio ecuatorianas, 4 periódicos y 6 canales de televisión de cobertura nacional.

Las conclusiones fueron que el Ecuador tiene 5 puntos menos en el porcentaje de representación de las mujeres en las noticias ecuatorianas en comparación con América Latina (29%). En lo que corresponde a opinión popular femenina tiene 8 puntos menos frente al nivel mundial (44%) y 15 puntos menos al de Latinoamérica (51%).

Además su presencia en las noticias como expertas tan solo alcanza el 15%; 5 puntos menos que el nivel mundial y 8 que el de América Latina. Por lo que la voz masculina es más valorada en los temas considerados importantes. Con respecto al periodismo, las profesionales femeninas alcanzan un 37% frente al 63% de hombres.

¿Cuáles son las soluciones?

La subdirectora académica de la Flacso y quien también participó en el foro, Gioconda Herrera,  reflexionó sobre la necesidad de un trabajo interrelacionado entre la construcción cultural de las identidades y las políticas públicas, las cuales deben estar más enfocadas al género, ya que siempre han estado concentradas en los derechos económicos, sociales y políticos.

De esta manera, se coincidió en que los problemas sociales no pueden estar separados de las necesidades y desafíos de las mujeres. Por lo tanto, debe ser un debate ciudadano: “Se debe mirar desde abajo. El cambio debe provenir desde los ciudadanos porque una política pública o una normativa no será suficiente para alcanzar la igualdad de género”, fue el consenso de las académicas en la Flacso.

En los colectivos -según la investigación explicada por Chavero- existe un compromiso por trabajar con los medios para ir introduciendo la agenda mediática de interés de las mujeres y cómo tratarla. Ellos creen que además de la sanción deben existir capacitaciones hacia los periodistas. (I)