El conocimiento del saber hacer (know how), las relaciones con los clientes, los procesos operativos y la tecnología de la información son aspectos que dan valor agregado a diferentes productos de exportación. A este valor agregado, muchas veces intangible, apuntan algunos sectores exportadores ecuatorianos como el florícola, el cacaotero y el sector textil, para diversificar y ampliar sus mercados.

Los clientes objetivos de estos sectores se encuentran en EE.UU., en algunos países latinoamericanos y en otros europeos. Adicionalmente, el acuerdo firmado entre Ecuador y la Unión Europea (UE) también genera expectativas para esos sectores, aunque los impactos serán a mediano y largo plazo. De hecho, trabajar en el valor agregado de estos productos es su mayor reto en estos momentos para ingresar a ese mercado de alta competitividad. 

Alto control de calidad en las flores

Rosas en diferentes tonos rojos, fucsias, anaranjadas y bicolores, con botones de hasta 6.2 cm y tallos cortados de acuerdo a la exigencia de cada cliente se pueden ver en la zona de poscosecha de la florícola Rosinvar, en Tabacundo. La ubicación geográfica del Ecuador permite producir este tipo de rosas reconocidas a nivel mundial. Las plantas reciben luz solar perpendicular durante aproximadamente 9 horas y eso permite obtener flores más resistentes. La exposición a la luz en otros países es de 6 o 7 horas.

Además del clima, humedad y altura favorables, “el valor agregado de las rosas está en la mano de obra”, sostiene Felipe Valdospinos, gerente de la florícola Rosinvar. Agrega que “al mecanizar la producción baja la calidad del producto”.

En efecto, desde la siembra hasta el empaque de rosas, las manos de los trabajadores son las encargadas de dar un trato adecuado a cada rosa. La mayoría de mujeres clasifican cuidadosamente cada rosa según sus características. Los paquetes de exportación, que contienen 15 rosas cada uno, deben ser totalmente uniformes y son empacados con plástico o cartón según el requerimiento de cada país.

Al momento de transportarlos se cuida que la cadena de frío no se rompa. A cualquier lugar del mundo llegan bajo una temperatura de 3 grados centígrados.

El valor agregado también está en el tiempo de duración de la rosa en el florero, en este caso es de 22 días. Sin la labor del personal capacitado obtener estas rosas de alta calidad no sería posible.

Cultivar una hectárea de rosas cuesta entre $350.000 y $400.000. Cada finca tiene un sistema de riego diferente. En el caso de Rosinvar se implementa riego por goteo que optimiza la cantidad de agua utilizada, pero al mismo tiempo riega cada variedad de rosa según su necesidad. Esta florícola ofrece 28 variedades de rosas: 3 son de rosas rojas y 25 de otros colores sólidos y bicolores.

La principal competencia de las rosas ecuatorianas está en Colombia, pero por precio, mas no por calidad. Por ejemplo, una rosa ecuatoriana en promedio cuesta $ 0,25 y  una colombiana $ 0,15.  

“Hemos hecho conocer al Ecuador mediante las rosas. Estamos en EE.UU., Rusia, Vietnam, Europa, etc.”, dice Valdospinos. El empresario considera que se debe potenciar más el cultivo de rosas en el país. “Somos muy pequeños, pero tenemos capacidad para desarrollar por lo menos 20.000 hectáreas en la Sierra, con 15 trabajadores en cada una. En la Sierra no hay otro producto de exportación además de las flores”, señala. El acuerdo con la UE les permitirá incursionar en Alemania y Francia, que son especialmente los países con mayor consumo de rosas por persona.

Chocolate con cacao fino de aroma

La materia prima, las fórmulas y los empaques son el valor agregado del chocolate fino de aroma que se elabora en Ecuador. Juan Carlos Román, presidente de la Asociación de Chocolateros Finos de Aroma del Ecuador, también menciona un valor agregado intangible: “la responsabilidad social que tenemos con los cacaoteros y las familias dueñas de fincas pequeñas, a quienes apoyamos para mejorar su calidad de producción”. 

Los principales destinos del chocolate durante este año han sido EE.UU., Chile, Canadá, Australia, España, Francia, Holanda, Italia, etc. Román dice que el acuerdo con la UE hará que los diferentes productores de chocolate negro fino de aroma con valor agregado estén en las mejores vitrinas de Europa, compitiendo directamente con los vendedores locales europeos.

“Vamos a tener que ser más competitivos tanto en calidad como en precio para que nuestros productos se consuman a nivel europeo”, acota. Aunque aún no se conocen los detalles del acuerdo, aseguran que no temen la competitividad en el mercado ecuatoriano. Al contrario, “vamos a tener que aprender a ser más eficientes para garantizar siempre una excelente calidad en nuestros productos”.

Textiles y la generación de empleo

El sector textil busca crecer y generar empleo. Javier Díaz, presidente de la Asociación de Industriales Textiles del Ecuador, considera que para lograr esos objetivos se requiere del aporte privado y público. Por un lado, a los empresarios les corresponde la innovación y la inversión, pero por el otro, el gobierno debe impulsar políticas públicas para la exportación de su mercadería. Por ahora están enfocados en exportar textiles ecuatorianos a Colombia, Chile y México.  

Se tienen altas expectativas en el mercado mexicano. Esperan que  “el gobierno impulse un acuerdo donde entren ciertos productos que tienen oportunidad de comercializarse sin aranceles”, menciona Díaz.

Además se espera que Chile sea un nuevo cliente. Si se concretan esos 2 mercados, las exportaciones se duplicarían en los próximos 2 años. Consideran a EE.UU. y Brasil como mercados más difíciles, pues “hace falta mejorar la oferta”, explica Díaz.

Ecuador exporta hilos, prendas de vestir, telas y textiles de hogar, entre otros. Sobre el valor agregado, Díaz sostiene que “eso es lo que recae totalmente en los empresarios. Se necesita gente preparada, productiva para mejorar acabados, trabajar en mejores fibras. La innovación de la parte comercial es otro reto y tenemos que saber vender”.

Sobre el acuerdo con la UE el sector está satisfecho. “El bloque europeo es el principal comprador de textiles y prendas de vestir en el mundo. Sabemos que vamos a competir con países del este europeo y  países africanos y somos conscientes de que no va a ser una apuesta inmediata, salvo con algunos productos como los textiles étnicos con los que ya se tiene experiencia”.

El sector opera con maquinaria e insumos europeos. Díaz añade que “el acuerdo va a consolidar un arancel 0 en casi todos los productos de forma inmediata. Actualmente ya se hace, pero el acuerdo les da garantía de que eso continuará. El acuerdo con la Unión Europea entraría en vigencia en 2016.

El economista y académico de la Universidad Católica del Ecuador, Jorge Regalado, considera que mientras llega esa fecha el sector público y privado deberían capacitar a los diferentes sectores e incentivar la generación de ideas.