En un recorrido de aproximadamente 2 horas se puede disfrutar de un ambiente tranquilo mientras se escucha el cantar de los pájaros y se admira la exuberante naturaleza. Solo debes dejarte guiar por la corriente cristalina del río Pita.

El sonido potente de la caída del agua a 80 metros de altura anunciará la presencia de este río. Montañas verdes, que dejan ver rocas, se abren al paso para deslumbrar con un paraíso natural: la cascada Cóndor Machay que en kichwa significa “nido del cóndor”.

Según la historia narrada por sus habitantes, hace varios años este era el hogar de grandes e imponentes cóndores que volaban cerca de la cascada y anidaban en las rocas. Hoy en día, si se cuenta con suerte se podrá observar a alguno. Este paisaje natural está localizado en la parroquia de Rumipamba, a 17 kilómetros de Sangolquí y es uno de los parajes rodeados de vegetación en el cantón Rumiñahui.

Con 3 parroquias urbanas (Sangolquí, San Rafael y San Pedro de Taboada) y 2 rurales (Cotogchoa y Rumipamba), Rumiñahui es el cantón de menor extensión de la provincia de Pichincha. Cubre una superficie de 132,78 km². Al estar ubicado en el corazón del Valle de Los Chillos, a 20 minutos de Quito, es privilegiado por paisajes que incluyen volcanes, nevados y páramos de la cordillera de Los Andes.

Su temperatura promedio es de 17 °C y es posible practicar ciclismo de montaña, senderismo, cabalgatas y descensos por cascadas. A lo largo del río Pita, en la parroquia de Rumipamba, los visitantes encontrarán muchas de estas opciones. Puedes iniciar el recorrido desde el puente de hormigón en el sector conocido como La Caldera, a 45 minutos de Sangolquí. Siguiendo el trayecto del río hacia abajo, a 3,7 km, se llega a las Cascadas de Vilatuña.

Durante el camino de una hora y media hay otras cascadas, como el Velo de la Novia, el Manto de la Virgen y el Pailón del Diablo.

Pero si se opta por el sendero aguas arriba del río Pita, se llega a la cascada Cóndor Machay.

En el recorrido, en las partes más altas y si las condiciones climáticas lo permiten, es posible observar la famosa Ruta de los Volcanes que incluyen el Pichincha, Ilaló, Cotopaxi, Sincholagua, Rumiñahui, Pasochoa, Antisana, Cayambe, Iliniza, Atacazo, Corazón, La Viudita y Quilindaña.

En este trayecto, se podrá observar diferentes tipos de árboles: alisos, pumamaquis, arrayanes, achupallas, suro, cedrillo y orquídeas.

Además, hay una variedad de mamíferos, aves y anfibios propios del lugar. Esta zona está localizada a 3.103 y 3.174 metros sobre el nivel del mar, por lo que el clima varía entre frío y templado.

En este mismo camino se encuentra la Hacienda Santa Rita, reconocida por promover el turismo sustentable y la conservación ambiental. La hacienda está localizada en el kilómetro 15 vía al Cotopaxi y a 15 km de la entrada al Parque Nacional Cotopaxi, y cuenta con cerca de 300 ha de conservación de páramos y bosque primario.

Con este entorno natural, es posible recorrer la zona en bicicleta y practicar trekking, rapel y pesca deportiva. A lo largo de los senderos del río también hay espacios para acampar. Mónica Terán, administradora del lugar, asegura que en la zona se han observado 20 tipos de aves, además de cervicabras y una especie de antílope con sus cuernos largos y retorcidos. En esta zona, también es posible presenciar un espectáculo único: el agua de la cascada Cóndor Machay baja por lares de lava petrificada.

Zonas urbanas que encantan

La lista de los espacios naturales que ofrece el cantón Rumiñahui es larga, como también lo es la de los lugares turísticos en las zonas urbanas. Uno de ellos es la iglesia en el parque central Juan de Salinas, ubicada en el casco colonial de Sangolquí. Además hay casas centenarias con coloridos detalles que adornan la fachada del sector.

Junto a la iglesia, en el pasaje El Conventillo, está el Mausoleo del prócer Juan de Salinas, uno de los protagonistas del Primer Grito de la Independencia gestado el 10 de agosto de 1809. En este lugar, reposan sus restos.

Según el portal web de la Asociación de Municipalidades Ecuatorianas, el 27 de marzo de 1992, el centro de la ciudad de Sangolquí fue declarado bien Patrimonial Cultural de la Nación por su arquitectura.

Al mencionar al cantón Rumiñahui las primeras imágenes que se vienen a la mente son los coloridos monumentos al maíz y al colibrí, emblemas de la localidad, que fueron dibujados por el artista plástico Gonzalo Endara Crown.

La primera escultura se encuentra en el redondel de las avenidas Abdón Calderón y Luis Cordero. La segunda está en otro redondel en las avenidas General Rumiñahui y General Píntag.  

Platos típicos a tu disposición

Rumiñahui se ha convertido también en una potencia turística por su gastronomía. El hornado sangolquileño ha alcanzado fama nacional y más de una familia se ha dedicado por décadas a su preparación.

Por ejemplo, el Palacio del Hornado es un restaurante heredado por 3 generaciones. Johana Chiquimarca, hija de la propietaria, asegura que la preparación de este platillo es un secreto, pues su sabor único es lo que atrae a los turistas.

Los restaurantes de platos típicos no faltan en Rumiñahui. Es posible degustar el cariucho de pata, seco de gallina, yahuarlocro, fritada, choclo con habas y queso y la chicha de jora, estos entre los platos más populares. El Hueco es otro restaurante que ha funcionado por más de 40 años y aunque empezó con la venta de tortillas con caucara, hoy es muy cotizado por su ají de cuy. Venden unos 200 cuyes a la semana. “El secreto del cuy de Sangolquí es su sazón que contiene pocas especies y, sobre todo, el corazón que le ponemos al prepararlo”, dice Jaime Toscano, administrador de la picantería.

Fiestas que congregan a turistas

En septiembre celebran la Fiesta del Maíz y el Turismo, una de las más esperadas en la localidad. Como parte del festejo se realiza el popular desfile del chagra. Además, se organizan las tradicionales corridas de toros, ferias gastronómicas y exposiciones artesanales.

Cada 31 de mayo, en el aniversario de cantonización, se realizan eventos culturales, sociales y deportivos. En estos días también se lleva a cabo el Paseo del Chagra.

En carnaval, este cantón recibe a decenas de turistas. Uno de sus principales atractivos es el desfile en el que intervienen 1.500 bailarines.

Según el Director de Turismo del cantón, Patricio Rodríguez, cerca de $ 350 mil se invierte al año para festividades y mantenimiento de los espacios turísticos.