Algo bueno. Connie Jiménez, Miss Ecuador, viajó a Filipinas para participar en el concurso Miss Universo 2017. Antes de irse acudió a expertos venezolanos para recibir asesoría. Estudió temas universales y pulió su imagen. Ella, quien tiene 23 años y es ingeniera, sabe que en el concurso predomina el estado fitness, el vestuario y la actitud. La riosense viajó aún con luto por la muerte de su novio Alfredo Vera, en diciembre pasado, en un accidente de tránsito.

Algo malo. Uno de los reporteros del programa de farándula de Teleamazonas montó una cámara en las afueras de una vivienda donde se encontraba Ángela Orellana, participante de un reality de competencia. La participante del programa, ofendida y en pleno uso de sus derechos constitucionales, demandará a ese espacio por meterse en su vida privada.

Lo más desagradable de todo es que los panelistas de dicho espacio pretendan decirle al televidente que aquello es una proeza periodística, pero solo es una muestra de que es alarmante el desconocimiento de las leyes de quienes manejan contenidos en los programas rosas.

Algo bueno: David Reinoso y Francisco Pinoargote estrenaron el espacio de humor político Amigazos en Gama TV. Buena sintonía y gran expectativa. Las últimas producciones que ese canal ha puesto al aire han sido lamentables y con poca audiencia. Resulta incomprensible que Las Mañanitas aún siga al aire.

Algo malo: la reportera de farándula Silvana Torres, de TC, televisión, debería controlar sus emociones frente a cámara. Su experiencia en pantalla es reciente, pero eso no debería ser excusa para decir con voz entrecortada en una nota periodística “Ecuador entero aclama a Bala “ (en referencia al exparticipante de Calle 7, Antonio Abril, quien está acusado por violación). Ocurrió durante una audiencia protagonizada por el imputado en la Fiscalía. Lo recomendable es que muestre una actitud imparcial frente a las cámaras.

Algo bueno: resultó emotivo el especial que en TC  le realizó a la conductora Ana Buljubasich en su programa de Casa en Casa. Se evidenció buen nivel de producción y amor del equipo que le rindió homenaje a la conductora más antigua de esta estación. Hubo  cordialidad y sorpresas.

El homenaje del canal permitió que Ana Buljubasich explotara nuevamente su faceta de actriz cómica, tal como lo hacía en la década del ochenta. Ella se abrió camino como animadora de espacios colegiales de competencia durante una época en que disputaban premios por conocimientos intelectuales.

Aunque es argentina de nacimiento, Buljubasich es parte de la historia de la televisión ecuatoriana. Por eso resultó acertado el homenaje que recibió. Se requiere amplia trayectoria para merecer tributos y ese sí es el caso de Ana Buljubasich. (O)