La Policía de Transporte Británica (BTP, por sus siglas en inglés) abrió este jueves una pesquisa para investigar el mayor accidente del siglo de tranvía ocurrido en Gran Bretaña, luego de que un tren de circunvalación al sur de Londres se descarriló, provocando la muerte de siete pasajeros y heridas en más de medio centenar de personas.

El accidente se produjo sobre las 06:10 GMT del miércoles en el barrio londinense de Croydon, cuando empleados se dirigían a sus trabajos en la capital británica.

El vehículo de la red Croydon Tramlink, que viajaba de New Addington a Wimbledon, se descarriló a velocidad en una curva de la vía después de atravesar un túnel y se volcó sobre un lado.

El conductor, un hombre de 42 años, cuya identidad se desconoce, fue arrestado bajo sospecha de homicidio involuntario.

Según la BTP, el tranvía viajaba a una velocidad que excedía el máximo permitido para una curva (19,3 km por hora). Un portavoz de la BTP informó que los investigadores y peritos evalúan “un número de pistas” como posibles factores que ocasionaron el accidente, desde malas condiciones meteorológicas, pasando por la posibilidad de que el conductor se haya dormido o sufriera una apoplejía. En total, 51 personas fueron trasladadas a hospitales cercanos por heridas leves y ocho con heridas graves.

El alcalde de Londres, Sadiq Khan, visitó el pasado miércoles el lugar del accidente y advirtió que el número de muertos podría aumentar. (I)