El ministro del Interior, José Serrano, informó este miércoles sobre la detención del ciudadano colombiano Oscar Alcántara (a) “Mosco”, quien supuestamente lideraba una banda delincuencial dedicada al microtráfico de drogas en varios sectores de la capital.

Según indicó el Secretario de Estado, alias “Mosco” era requerido en su país de origen por ser el dueño de los barrios del narcotráfico en Bogotá. El ahora detenido escapó en 2006 de una cárcel colombiana, donde purgaba una pena de 40 años, y por lo que era buscado por la Policía Internacional (Interpol), a través de una difusión roja.

La Policía señaló que en las calles Diego de Vásquez y Manuel Córdova Galarza aproximadamente a las 09h00, se realizó un control policial a un vehículo marca Chevrolet Orlando de placas PBZ-3943, conducido por Alcántara,  quien presentó su cédula de identidad.  Luego de verificar la información, se comprobó que el ciudadano colombiano  había evadido los filtros de migración al ingresar a nuestro país

En las próximas horas, las autoridades anunciaron que se efectuará la extradición del extranjero, donde deberá ser rendir cuentas a la justicia de su país, donde también se reportó la detención de un hermano de “Mosco”, dedicado a la misma actividad narcodelictiva.

Investigaciones realizadas en Colombia determinaron que alias “Mosco” como se le conoce a Oscar Alcántara, tenía el control de la venta de estupefacientes en el sector conocido como Bronx en la ciudad de Bogotá conjuntamente con su hermano César González Díaz conocido con el alias de: “Homero”.

Gancho Mosco y Gancho Homero formaron una alianza con la peligrosa Banda denominada La Cordillera para dominar el sector de Bronx en Colombia, infundiendo miedo y temor mediante el asesinato de personas para ganar territorios para el expendio de drogas. Estas agrupaciones delictivas expandieron sus actividades ilícitas a nuestro país, concretamente a la ciudad de Quito utilizando la misma modalidad que tenían en Colombia.

En Quito, la Policía indicó que el extranjero intentaba controlar tres barrios populares con el expendio de estupefacientes, donde ganaba unos 40 mil dólares diarios, pero los operativos básicos de inteligencia y el trabajo conjunto con la Interpol, permitieron localizarlo y capturarlo.