Si bien el año pasado ingresaron 625.536 casos en la función judicial, los jueces resolvieron 801.230 causas.

Esta productividad procesal sucede porque en las dependencias judiciales del país, a más de los procesos nuevos, se despachan también los de años anteriores, según el presidente del Consejo de la Judicatura, Gustavo Jalkh.

Además, se redujo la demanda del servicio en 50 mil procesos, esto porque el nuevo sistema procesal vigente tiene más exigencias y hay que demandar con pruebas.

También se aplican métodos alternativos de solución de conflictos y con ello se evita el inicio de una buena cantidad de juicios, dijo el funcionario.

Al referirse al ámbito penal, sostuvo que el sistema procesal está al día, pues lo que ingresa se resuelve en los tiempos que la justicia determina, a excepción de casos en los que hay personas prófugas.

En 2016 se convocaron 135.000 audiencias y se mantiene un récord menor al 4% de diligencias fallidas… Esto significó un ahorro público de alrededor de $ 30 millones en tiempo efectivo de operatividad de la Función Judicial”, señaló.

En el juzgamiento de delitos flagrantes, del 10 de agosto de 2014 a diciembre de 2016, se resolvieron 25.444 causas, a través de los procedimientos ordinario, abreviado y directo, en este último, las sentencias fueron dictadas en menos de 25 días. “Esto significa un ahorro público de $ 181 millones en mayor eficiencia judicial”. Además se grabaron 426.572 audiencias, lo que generó un ahorro $ 17 millones. (I)