De los 47 implicados en el caso de rebelión por la revuelta policial ocurrida el 30 de septiembre de  2010, 15 irán a juicio. Así lo determinó la jueza  Décima de Garantías Penales de Pichincha, Carmen Baño, pues el fiscal  Jorge Cano se abstuvo de implicar  a 32 policías. 

A las 11:00 aproximadamente, los agentes  acusados llegaron  hasta el Palacio de Justicia  para   la audiencia preparatoria de juicio y de formulación de dictamen.

La diligencia  comenzó el 30 de agosto pasado  y fue suspendida el 7 de septiembre. Con la presencia del fiscal Ramiro Freire,  la secretaria del juzgado,  Paola Armas, leyó por más de cuatro horas  el auto resolutorio:  informe en el que se  determina a qué personas se llama al juicio.

Así  se procedió a señalar la participación exacta de los uniformados, su ubicación, su  manifestación y el material que utilizaron para llevar a cabo la revuelta, como vehículos, armas y demás implementos, que pertenecen al Estado.

En más de 140 páginas constan los informes de investigación que se realizaron para determinar responsabilidades de cada uno de los actores, sea en forma material o en apoyo por medio de radio patrullas.

Un caso  es el de la capitán Paola Mafla, quien fue identificada como la persona que transmitía mensajes a sus compañeros a través de la radiopatrulla.

El informe  detalló la actividad de los involucrados y su actuación violenta en contra de las autoridades y la población civil que se encontraban en los alrededores  ocupados por la Policía. Hasta el cierre de esta edición la audiencia continuaba.