Barrios del sur se unen contra la ola delictiva

El robo a personas se ha convertido en uno de los principales problemas de inseguridad que afecta a los habitantes de  las  ciudadelas colindantes al populoso sector  de la Stella Maris, al sur de Guayaquil.

Uno de los sitios  afectados es la  cooperativa “Las Brisas”, lugar en el que los delincuentes aprovechan las despobladas calles para arranchar las pertenencias a los transeúntes.

“Hace poco le robaron el celular a una chica en toda la esquina...”, comentó Teresa Franco, moradora del sector, quien reconoció que los frecuentes hechos delictivos  que se cometen en la zona  mantienen  atemorizada a la vecindad. “Estamos  tensos... (uno)   no se sabe cómo reaccionar cuando ocurren estos casos”, señaló.        

Nancy Carvajal, habitante  del sector, aclaró  que los asaltantes casi nunca son identificados por la comunidad debido a que son de otros barrios. “Los que vienen a hacer sus maldades no son del sector. Y cuando pasa nadie ve nada, pero involucran al (sector) “Las Brisas”.

Ante esta problemática, el Comandante de Policía del Distrito Metropolitano  de Guayaquil,   Ramiro Mantilla, visitó el barrio para mantener un conversatorio sobre seguridad ciudadana con los moradores que deseaban denunciar los ilícitos que se cometían.  

Así, los presentes  expusieron sus   inquietudes ante el alto mando de la institución  y   exigieron    mayor presencia policial en las paradas de buses, sobre todo en las horas pico, y que recorran los parques, lugares preferidos por los jóvenes que se dedican a consumir y a vender droga en altas horas de la noche. 

En respuesta el oficial Mantilla dijo que    el Ministerio del Interior está empeñado en construir más de 100 UPC Guayaquil, con capacidad de 12 miembros y la instalación del Sistema de Alarmas Comunitarias.

Pidió a los moradores coordinar las labores de seguridad con el oficial encargado de la Zona Segura Guasmo  a fin de que se organicen porque en el mes de mayo se realizarán  varias capacitaciones para formar líderes comunitarios. “Lo primero que deben hacer los barrios es estar bien organizados y unidos para alcanzar el único objetivo de disminuir la delincuencia”.

Este criterio  fue apoyado por el morador  Gustavo Hurtado, quien coincidió en que se debe abordar el tema de seguridad de forma integral. “Estamos cansados de que vengan y roben en nuestra cara”. Dijo  que el  problema que impide enfrentar a la delincuencia es el no estar unidos, ya que muchos en la zona “se hacen los ciegos” cuando alguien está siendo atacado por un asaltante.