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Policía busca a N. Javier por crimen de colegiala
La Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Desapariciones, Extorsión y Secuestros de Personas (Dinased) de la Policía Nacional busca a N. Javier, supuesta pareja sentimental de la colegiala Milena del Carmen Ramírez Hermenegildo, de 18 años, quien apareció muerta el lunes último en una zanja en el sector de la parroquia Los Lojas, en la vía Salitre-La Aurora, en Guayas.
El nombre del sospechoso fue proporcionado por la madre de la víctima a los agentes de la Dinased.
Otros familiares, quienes no se quisieron identificar, dijeron que el hombre tiene 35 años y está casado. Agregaron que por esa situación, la muchacha tuvo problemas con la familia política del individuo y recibió amenazas de muerte.
“Se presume que haya tenido una confrontación con el novio”, indicó Mike Ramírez, tío de la occisa.
En tanto, José Ramírez, otro tío de la víctima, señaló que dejará todo en manos de Dios.
Además, en la entrevista preliminar que la progenitora tuvo con los investigadores, ella mencionó los nombres de un adolescente que cortejaba a su hija. “La señora indicó que (su hija) tenía un pretendiente que no era aceptado por ella, ya que parecía una persona conflictiva y que andaba en malos pasos”, indica el reporte preliminar de la indagación.
Ante esto, este diario se comunicó con la mamá del adolescente, de 17 años, quien se mostró sorprendida y preocupada por el involucramiento de su hijo en la muerte de Milena. “No entiendo por qué lo dice, ella sabe que solo se veían los fines de semana. No tiene por qué involucrar a mi hijo. No deberían meter a un menor en un caso tan grave. Están perjudicando a un joven”.
La ciudadana reveló que su vástago se comunicó con Milena el jueves 17 de agosto. “Tenemos el registro de llamadas y los mensajes. Tenemos todas las capturas de pantalla del teléfono celular. Incluso mi hijo llamó el sábado a la mamá de la chica para preguntar por ella y (la señora) no sabía nada de lo que estaba pasando. Después mi hijo no le contestó las llamadas porque el teléfono se le dañó”. (I)