Los aguaceros caídos en las últimas horas en el centro, sur y norte del país empiezan a causar estragos.

En Esmeraldas se reportó una víctima fatal. Se trata del joven M.I.G. a quien le cayó un cable de alta tensión en el momento en que un torrencial aguacero cubría la ciudad.

La Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) inició una investigación con el fin de determinar las causas por las que se desplomó el conductor de electricidad.

Mientras, en Latacunga, la tarde del lunes cayó un chubasco que colapsó el sistema de alcantarillado. Los bomberos tuvieron que atender más de 60 llamadas de emergencia de ciudadanos que reportaron la inundación de sus viviendas.

El anegamiento afectó también algunos establecimientos educativos. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) señaló que se trató de una de las lluvias más fuertes desde 1998.

En Cuenca, tras varios meses de sequía, los chubascos ya caen y con ello los ríos mejoran su caudal.En Riobamba, desde la tarde del lunes hasta la noche se registró un chaparrón que desbordó las alcantarillas.

Un automotor se quedó atrapado en una alcantarilla sin tapa, en las calles Duchicela y Esmeraldas. Vecinos del sector tuvieron que ayudar al conductor para sacar al automotor.

Hugo Merino, director provincial de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), anunció que para el día viernes se tiene programado visitar algunos sectores de la provincia que en otras ocasiones ya han  tenido problemas debido a las lluvias. Mientras tanto, en la región Austral las precipitaciones empezaron a caer con más fuerza.

La mañana de ayer, Huaquillas, provincia de El Oro, amaneció con una lluvia que se prolongó hasta el mediodía, en tanto que en Machala la leve llovizna anegó las calles, obstaculizando el paso a los peatones.

Estos primeros aguaceros evidenciaron los problemas que se suscitan por la falta de drenaje en ambas ciudades. Los barrios del norte y sur de la capital orense que no están asfaltados se llenaron de lodo.

“Esto es de todos los años. En cada invierno es así”, dijo Francisca Alvarado. En Azuay, los chubascos también cayeron en varias zonas. Cuenca comenzó a salir de una sequía que le afectó por casi dos meses.

El caudal de los ríos mejoró y el Inamhi prevé que la intensidad de las lluvias se mantenga.