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Una menor se ahogó al caerse de una canoa, en la que viajaba junto a otras personas, en un río crecido en napo
Lluvias y deslaves afectan a 12 provincias (Galería)
Tres cuerpos fueron hallados ayer al interior de una camioneta sepultada por un deslave en el kilómetro 28 de la vía Alóag-Santo Domingo.
El vehículo es una Chevrolet Dimax concho de vino, que fue descubierta de manera accidental cuando maquinaria del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) y de otras entidades retiraba el lodo y las piedras, con el fin de despejar la carretera que une la Costa y la Sierra.
El automotor es de placas ABC-6627, de la provincia de Azuay, y está matriculado a nombre de Julio Cabrera. Dos de las víctimas fatales fueron identificadas como Henry Andrés Chávez, de 31 años, y Gina Magaly Silva Velasco, de 34. Se ignora la identidad del tercer muerto.
En la zona reina el mal tiempo (35 derrumbes ocurrieron en las últimas 48 horas) y la ruta de cuatro carriles continuaba bloqueada en otros puntos, como el kilómetro 78, sector Alluriquín.
En esa comunidad, las Fuerzas Armadas intervinieron para evacuar a la población ante el riesgo de que se produzca un alud de mayores dimensiones.
No fue la única zona en que actuó el personal militar. Ayer, 2 niños y un adulto fueron rescatados por un helicóptero del Ala de Combate 22, en la parroquia riosense de San José del Tambo, por el desbordamiento del río San Pablo.
En el cantón orense de Santa Rosa, otras 150 personas también fueron evacuadas de sus hogares porque salió de su cauce el río Pital.
En Napo, una niña murió ahogada al naufragar la embarcación en la que viajaba con 9 personas. Al parecer el exceso de carga y la corriente causada por la crecida provocaron que la nave sucumbiera. Una anciana está desaparecida.
Estos y otros incidentes son atribuidos a la fuerte estación invernal que en los últimos días causó inundaciones, derrumbes, daños en puentes y desbordamientos de ríos en Guayas, Esmeraldas, El Oro, Chimborazo, Tungurahua, Azuay, Bolívar, Morona Santiago, Napo, Loja, Zamora Chinchipe y Santo Domingo de los Tsáchilas.
De acuerdo a los ECU-911 de las distintas provincias, dos puentes tienen problemas: el Chague, que está en la vía Bucay-Naranjito, y el que se encuentra en la parroquia Febres Cordero, en Los Ríos.
Entre tanto, los habitantes del barrio San Francisco de Miravalle (en el oriente de Quito) esperan la intervención de autoridades municipales para el aseguramiento del puente que los une con Guápulo.
El martes pasado, alrededor de 800 moradores organizaron una protesta para llamar la atención sobre el estado del viaducto que tiene cerca de 5 décadas de construido, cuyas bases muestran socavamiento.
Las principales carreteras afectadas por aludes en el país son: Alóag-Santo Domingo (Santo Domingo), Pallatanga-Bucay (Chimborazo), Baeza-Quito (Pichincha), Macas-Riobamba y Bella Unión-Limón (Morona Santiago), Guanujo-Echeandía, El Tambo-Chillanes y Balsapamba-San Miguel (Bolívar), Zamora-Cumbaratza (Zamora Chinchipe), entre otras.
Ayer, a las 16:00, moradores del recinto Palma Real, del cantón Quinindé (Esmeraldas), cerraron por una hora la carretera Esmeraldas-Quinindé, en reclamo de atención por la inundación de sus viviendas.
8 barrios bajo el agua
Las fuertes lluvias caídas la madrugada de ayer desbordaron el río Pital que afectó al menos 8 barrios del cantón Santa Rosa (El Oro).
Familias del lugar, que congregan unas 150 personas, fueron evacuadas de inmediato. El alcalde santarroseño activó el Comité de Operaciones de Emergencia (COE).
Las Fuerzas Armadas llegaron al barrio Las Lomas -uno de los más afectados- para evacuar a las familias que intentaban sacar sus enseres. Según los moradores del sector, la lluvia empezó a las 03:00 y se extendió hasta las 07:00, lo suficiente para que las calles se inundaran y el agua ingresara a las viviendas. Barrios como el 29 de Noviembre, Orito, Las Lomas y Nueva Esperanza quedaron bajo el agua.
Mientras, en barrios del norte de Machala varias familias resultaron perjudicadas por las fuertes lluvias. En los sectores Los Sauces y Federico Páez, las viviendas quedaron anegadas por los chubascos.
En Los Ríos también se vivieron momentos de emergencia. La capital provincial, Babahoyo, y los cantones Urdaneta y Montalvo enfrentaron problemas por las inundaciones. La región centro es otra de las golpeadas por el mal tiempo. La vía Riobamba-Guayaquil quedó cerrada a causa del gran deslave en el sector La Puntilla Cascajal.
Según los técnicos de la Secretaría de Gestión de Riesgos, maquinaria pesada ya trabaja en la zona, pero el paso vehicular seguía suspendido.
Las lluvias son intensas y constantes en Ambato, Riobamba y Latacunga. En la capital tungurahuense hubo inundaciones y alcantarillas rebosadas en varios barrios, pero las calles están habilitadas. En Cuenca más de 10 horas de lluvia provocaron la crecida de los ríos y el continuo deterioro de las vías de segundo y tercer orden en la provincia del Azuay.
Según los informes de Etapa, el río Yanuncay fue el que más altos niveles alcanzó. En la mañana subió a 40 metros cúbicos de agua por segundo, cuando lo normal es 20 metros cúbicos. Iván Palacios, gerente de la entidad, dijo que pese al incremento del caudal aún estaba lejos de la crecida que se registró el año anterior. También el río Tarqui y el Tomebamba subieron su nivel.
Mientras que Guayaquil soportó la tarde del jueves un torrencial aguacero que causó problemas. En sectores como Urdesa, Las Acacias, Pradera, Alborada, Sauces, Guayacanes se reportaron calles anegadas. Los niveles de agua sobrepasaban los 30 cm y llegaron a cubrir las aceras. La Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG) reportó 5 accidentes de tránsito en la noche del jueves.
Hasta el cierre de esta edición, el ECU-911 indicó que en total el temporal ha dejado 5 muertos, 160 casas afectadas y 100 evacuados. Los servicios se mantienen en alerta en 9 provincias. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) prevé lluvias de intensidad moderada este fin de semana.
DATOS
La Secretaría de Gestión de Riesgos recomienda a quienes viven al pie de esteros y ríos, o cualquier otra zona de riesgo, que tengan listo un plan de evacuación para ir a un lugar seguro en caso de emergencia.
La entidad también puntualizó que si el agua comienza a ingresar a las viviendas se desconecten los aparatos electrónicos para evitar los cortocircuitos y choques letales.
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) reportó en la última semana que las tormentas eléctricas han tenido mayor incidencia en la región amazónica.
La entidad recomienda que durante estas situaciones hay que evitar salir a exteriores y buscar protección en viviendas y vehículos. También hay que mantenerse alejado de árboles altos y aislados, y colinas altas. Además, hay que alejarse de postes de teléfono o antenas de comunicación, y manipular objetos metálicos.