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La construcción y adecuación bordeó los $ 14’500.000
Edificio del Montepío es ahora un Hospital del Día (Galería)
Luis Acosta tiene 68 años, es jubilado y presenta una molestia en la rodilla derecha que le impide movilizarse con facilidad. Por eso recibe rehabilitación y ayer lo hizo en las modernas instalaciones del nuevo Hospital del Día, que fue reinaugurado en el Centro Histórico de Quito.
“Me he atendido en otros lugares, pero la distancia siempre complica. Ahora me agrada venir a este hospital porque estoy muy cerca y, además, tiene completos espacios para todo lo que tiene que ver con rehabilitación, incluso hay un gimnasio”, comentó Acosta.
En las instalaciones del Centro Quirúrgico Ambulatorio se atenderán 10 especialidades: traumatología, cirugía vascular, nefrología, oftalmología, urología, ginecología, audiometría, medicina general. Además cuenta con 3 quirófanos inteligentes para intervenciones de media complejidad y uno más para intervenciones primarias.
Estos ambientes cuentan con lámparas led que dan mejor definición del espacio en que intervienen los médicos. Además, los pisos y las paredes tienen un recubrimiento especial que garantiza la asepsia del área por más tiempo.
Hay monitores que facilitan la transmisión de la cirugía con fines educativos y de capacitación para profesionales y estudiantes.
Inicialmente se ha previsto una atención en quirófanos diaria de 10 pacientes, y se espera incrementar la cantidad.
“Estamos adecuando el uso de los quirófanos para no realizar cirugías solo en la mañana, sino también en la tarde y ampliar así los servicios. Originalmente atendemos 500 pacientes diarios en consulta externa y lo que buscamos es incrementar ese número al menos a 800 en el futuro”, indicó Hugo Villacrés, presidente del directorio del IESS.
Las nuevas instalaciones se readecuaron en el desaparecido Monte de Piedad del IESS y posteriormente funcionó como centro ambulatorio de la misma institución. Demoró 10 meses y se invirtieron $ 14’500.000 en la infraestructura y el equipamiento médico.
“Hemos pasado de un dispensario a un hospital del día en un edificio declarado como patrimonio, donde se adecuaron instalaciones cálidas y acogedoras para ampliar nuestra cobertura a más de 200 mil afiliados y jubilados no solo del Centro Histórico de Quito, sino también de 11 barrios aledaños. Así fortalecemos nuestro sistema de salud pública”, indicó Geovana León, directora provincial del IESS en Pichincha.
Este hospital ambulatorio se encuentra en un edificio patrimonial, de 6 pisos, totalmente rehabilitado en el interior. En la planta baja funcionan la farmacia y el sistema administrativo para la toma de citas médicas. Aquí también se ubican las salas de rehabilitación y el moderno gimnasio, donde jóvenes y, sobre todo, adultos mayores asisten para cumplir con las sesiones de magnetoterapia, electrodos o compresas, según indicación médica.
En todos estos espacios hay camas eléctricas en las que los pacientes reciben su terapia.
“Realmente me he sentido muy bien con el tratamiento que recibo. Son 10 sesiones las que debo estar aquí, voy a la tercera y estoy bastante mejor”, indicó Juan Zamora, quien recibió magnetoterapia.
En el gimnasio hay desde pelotas hasta pesas, las que los usuarios, afiliados y jubilados utilizarán para mejorar su condición física y las distintas dolencias que pueden presentarse, sobre todo en articulaciones de piernas y brazos.
La apertura de este espacio en Quito permitirá desconcentrar la demanda que hasta el momento tiene el Carlos Andrade Marín, para que este centro especializado solo atienda las cirugías más complejas.
“Estamos seguros y convencidos de que los afiliados deben ser georreferenciados a los centros de salud que se encuentran más cerca. Por eso en 90 días se entregará el Centro de especialidades y consultorios en Guayaquil, además de la construcción que estamos haciendo en el nuevo hospital del norte”, agregó Villacrés.
Datos
Hasta el momento el IESS posee 97 hospitales para atender a 3 millones de afiliados. El Gobierno ha invertido más de $ 1’300.000.000.
A finales de mes se entregarán 2 centros especializados más, uno en el Comité del Pueblo, en el norte de Quito, y el centro de fisiatría especializado en adultos mayores, en Santo Domingo de los Tsáchilas.
El hospital de especialidades Carlos Andrade Marín (HCAM), en Quito, tiene un presupuesto de $ 200’000.000. Desde esta semana, a través del robot Da vinci, se hará la primera cirugía robótica.
El HCAM fue acreditado hace pocos días para que realice trasplantes pulmonares. Solo 3 países más en América Latina realizan este tipo de intervenciones quirúrgicas de alta complejidad.