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El Telégrafo
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Correa reitera orden de destruir máquinas de mineros ilegales

Correa reitera orden de destruir máquinas de mineros ilegales
12 de febrero de 2012 - 00:00

La fría mañana no impidió que cientos de habitantes del barrio La Magdalena, en el sur de Quito, participaran en el  enlace ciudadano 258. En medio de aplausos, el presidente Rafael Correa  presentó su informe semanal luciendo una chompa del Ministerio de Turismo con la frase “Ecuador ama la vida”.

Entre los temas abordados, el Mandatario advirtió que en la última reunión del Consejo de Seguridad Pública del Estado (Cosepe) se resolvió terminar con la minería ilegal: “He dado la orden de se destruya  esa maquinaria”, sostuvo.

Explicó que más de 500 piscinas mineras han contaminado ríos y la vegetación en varias zonas de Esmeraldas, Zamora Chinchipe, Morona Santiago y Napo. “No se trata de pequeños mineros artesanales, sino de capitales mal habidos que están destrozando nuestros ríos”. 

Y denunció que los detenidos por esa infracción son inmediatamente puestos en libertad por los jueces, quienes  alegan que los delitos mineros no están contemplados en el Código Penal. “Pero existen los delitos ambientales”, insistió el Jefe de Estado, tras señalar que aquello ocurre con la complicidad de un grupo de funcionarios de la Agencia de Regulación y Control Minero (Arcom), quienes alertan a los mineros ilegales sobre los operativos. A esos servidores públicos  amenazó con “mandarlos a la casa” si no cumplen su función. 

Esa situación se agrava por  la inoperancia de algunos fiscales. “El delito ambiental es de acción pública y los fiscales pueden actuar de oficio, no hace falta denuncia”, recalcó el gobernante y recordó que lo mismo sucedió con siete integrantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que hace unos días fueron detenidos por posesión de explosivos, pero luego fueron liberados porque no habrían cometido delito flagrante. 

El Universo puede rectificar

Sobre el caso El Universo, cuya audiencia fue aplazada  para el 15 de febrero, Correa enfatizó que al tratarse de un recurso de casación los jueces solo tendrán que revisar 17 páginas que corresponden a la sentencia para ver si se apega a derecho, pero no se analizarán los hechos expuestos  en 8.000 fojas.

Aspira a que la próxima semana termine el proceso y añadió: “Si por ser presidente tengo que renunciar a mi dignidad de persona, yo prefiero renunciar a la Presidencia” y al movimiento político.

Insistió en que el proceso puede parar cuando el medio de comunicación rectifique y pida disculpas a los ecuatorianos, pues, reiteró, retrasar la ejecución de la sentencia obedece a intereses políticos de los directivos del rotativo guayaquileño, quienes incluso habrían contratado empresas de relaciones públicas en el extranjero para apoyar su causa.

Mejoras para militares

El incremento salarial del 5,25% a los militares está previsto en la ley para todo el sector público, de acuerdo con la inflación anual, reiteró Correa, tras descartar que las visitas a los destacamentos militares tengan el objetivo de  congraciarse con los uniformados, como aseguraron algunos medios de comunicación.

Explicó que el recorrido realizado, el martes pasado, en la frontera norte fue para establecer algunos mecanismos que mejoren las condiciones en las que se desenvuelven los soldados asignados a la zona.

Como parte de esas mejoras  se revisará el régimen laboral de los militares y se les dará mayores facilidades para su trabajo, adecuando instalaciones y brindándoles seguridad  durante su movilización. Se incrementarán los aviones logísticos y las unidades de transporte, también se intentará mantenerlos cerca de sus  familias.

Cumbre de las Américas

El presidente Correa insistió en su petición a Colombia para que Cuba participe  en la próxima  Cumbre de las Américas, agendada para abril de este año. Calificó como “un rezago del colonialismo” en pleno siglo XXI la marginación del país caribeño. 

Señaló que con esta posición no se pretende afectar las relaciones bilaterales con el presidente anfitrión del encuentro, Juan Manuel Santos, pero advirtió que si Cuba no es invitada, los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) han resuelto no asistir en solidaridad con el Gobierno de la isla.

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