Unos 1.200 vendedores ambulantes de la ciudad de Cuenca, provincia del Azuay, se reunieron en las afueras de la Municipalidad este viernes para exigir que se cumplan las promesas hechas por las autoridades locales en el anterior.

Los trabajadores ambulantes, que paralizaron las actividades del Centro Histórico por cerca de una hora, expresaban con pancartas, carteles y gritos sus deseos de que se concreten las medidas anunciadas por el Alcalde de la ciudad, Paúl Granda, sobre sus traslados a otras zonas de la urbe entre las que destacan la plataforma comercial Miraflores, ubicada en el norte, y que les den los beneficios ofrecidos.

“Lo que pedimos es el derecho al trabajo, pero ordenadamente. (...) Nosotros estamos pagando cuatro dólares mensuales para recorrer la ciudad de Cuenca, más que los estacionarios. Nosotros queremos el ordenamiento de la ciudad, pero también queremos el respeto al comerciante y que lo ofrecido que se cumpla...” dijo Carlos Mauricio Zambrano, dirigente de una de las organizaciones los trabajadores.

Los representantes dicen que cuando se adecue la plataforma de Miraflores ellos inmediatamente acudirán allá, pero que ésta al momento no cuenta con techo y no tienen líneas de buses que puedan transportarlos hacia el sector.

“En el mes de mayo el Alcalde dijo que iba a poner un techo, una línea de buses y toda la seguridad que necesita el comerciante del sector de la 9 de Octubre. Desgraciadamente ya estamos febrero (... )Queremos que ponga el techo. Si ponen el techo mañana, mañana nos vamos (...) Se han gastado 11.000 dolares en esto”, dijo Galo Vázquez, otro dirigente.

La Municipalidad de Cuenca construyó la Plataforma Miraflores y dotó de servicios al sector por un costo de 10.000, según informó Pablo Muñoz, coordinador del Departamento de Ferias y Mercados de la Municipalidad a un diario local.

En octubre pasado las autoridades de Cuenca habían ofrecido reubicar a los comerciantes informales en la plataforma Miraflores, una vez terminadas las adecuaciones del lugar, que estaban previsto para finales de ese mes. Además, a otros comerciantes se los trasladaría a otros centros de expendio donde todavía existieran puestos libres.

En noviembre la Municipalidad informó que el plazo del traslado se había extendido para evitar eventualidades en el mismo y se ofreció a entregar 20 carpas, de nueve metros cuadrados cada una, para los comerciantes informales se ubicaran en la plataforma. Las carpas eran una medida temporal hasta que se terminara la construcción de una cubierta, cuyo costo bordearía los 200.000 dólares.