Las actividades mineras de la empresa Sominur continuarán suspendidas hasta que corrija todas las medidas de seguridad y se aclare las causas del fallecimiento de cinco trabajadores, suceso ocurrido el pasado miércoles en una mina de la localidad Ponce Enríquez, provincia del Azuay.

El viceministro de minas, Federico Auquilla, recorrió ayer la zona acompañado de Jaime Jarrín, director de la Agencia de Regulación y Control Minero (Arcom), Humberto Cordero, gobernador del Azuay, y autoridades de la Subsecretaría de Minas Región Sur  y del Ministerio del Ambiente.

Auquilla indicó que el ministerio "ha tomado la determinación de suspender los trabajos en esta mina para precautelar la vida y la salud de los trabajadores".

El funcionario desechó la versión de que un derrumbe habría obstruido el ingreso de oxígeno al interior del yacimiento, y pidió a los concesionarios mineros que implementen medidas de alerta que adviertan eventuales problemas de aire al interior de la misma.

Mientras tanto Jaime Jarrín, director de la ARCOM, indicó que previo al reinicio de operaciones la empresa Sominur deberá mejorar la señalización interior de la mina, fortalecer los sistemas de ventilación, efectuar una adecuada  capacitación e inducción a los nuevos trabajadores e instalar detectores de gases.

El gobernador Humberto Cordero señaló que se espera en las próximas horas tener los resultados de las autopsias practicadas a las víctimas para conocer las causas de su fallecimiento.

En tanto, el gerente de la empresa minera, Marco Cordero, aseveró que los 180 trabajadores están asegurados, con sus contratos al día.

El miércoles 22 de febrero, un accidente en la mina La Cascada produjo la asfixia de cinco trabajadores y fueron rescatadas al menos 15 personas a quienes se les trasladó a diferentes casas de salud.