Gerardo Miño, taxista con 15 años al volante, toma su distancia con el vehículo que está delante de él, en la intersección de las calles Chile y Luque, en el centro de Guayaquil, donde el tráfico vehicular al mediodía es intenso.

Detrás de él, otro conductor hace sonar insistentemente la bocina. El semáforo está en verde pero Miño detiene su marcha pues nota que el flujo de automotores avanza lento en la intersección siguiente. “No falta mucho para que cambie a rojo y puedo estancarme a mitad de la calle”, explica.

El punto en mención es una de las 14 intersecciones donde, desde el 1 de junio próximo, la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) iniciará controles para multar con $ 386 a quienes bloqueen los cruces.

Sin embargo, conductores como Miño, se confiesan preocupados. Señalan que el sistema de semaforización aún no está calibrado de tal forma que permita fluidez. “Son segundos de desincronización pero por muy poco que sea, afecta tremendamente durante las horas pico”, asegura el taxista.

El problema es más evidente en calles con elevado tránsito como las avenidas Quito y Machala, especialmente, entre Colón y 9 de Octubre.

Si bien los semáforos de Quito y Machala están configurados de tal forma que permiten una “ola verde” de mucha fluidez, el inconveniente se origina en los dispositivos que están en las intersecciones. Gabriel Merchán, un comerciante de frutas que recorre frecuentemente las avenidas, refiere que los mayores atascos se presentan a la altura de Clemente Ballén y 10 de Agosto.

“En realidad, no es mucho el tráfico que viene por la 10 de Agosto pero los semáforos de ese lado demoran en ponerse en rojo cuando acá (av. Quito) ya está en verde”, comenta Merchán.

Otro factor detectado es que existen intersecciones como Chile y Aguirre donde los carros que giran a la izquierda desde Aguirre, durante el lapso verde del semáforo, originan un bloqueo porque el flujo vehicular de la calle Chile está detenido por el semáforo en rojo.

El proyecto de control de las intersecciones se inició en octubre de 2017 con la firma del contrato para la adquisición de 14 cámaras de vigilancia. Xavier Sandoval, director de Informática de la ATM, reveló a EL TELÉGRAFO que tienen identificados 18 puntos de bloqueo en la zona urbana. (I)