Cerca de las 07:30 de cada mañana llegan decenas de personas a las instalaciones de la Fundación Nahím Isaías para tomar un tique.

Los pacientes al entrar son atendidos por una recepcionista que  los dirige a una de las cinco salas de espera que hay en la institución.

Después de 44 años desde su creación, el centro médico de esta fundación  atiende a casi 600 personas díariamente en  24  especialidades, entre ellas:  medicina general, cardiología, ginecología, oftalmología, neurología y psicología.
El centro cuenta con un espacio de  estimulación temprana para niños que tienen entre 6 meses y 5 años de edad y un nuevo proyecto que se especializa en la curación de heridas y rehabilitación.

Cada consulta cuesta $ 5,  a excepción de  nutrición que es de $ 11; y proctología,  $ 35 (sólo la primera vez se paga).    Susana Atis, quien asistió al lugar a realizarse un eco, comentó que el centro de salud tiene precios accesibles y la espera es corta. “Vine a hacerme un eco que me costó $ 7,  aunque no es gratis, la atención es definitivamente buena”.

Según la administradora del centro médico, Patricia Alvarado, la fundación brinda también servicios de laboratorio, rayos x, ecografías y venta de  medicamentos.

“Los precios  son  bajos, porque trabajamos en alianza con  laboratorios que nos dan un descuento adicional por ser fundación, ese descuento lo transmitimos al paciente”, explicó Alvarado.

Eduardo Mendoza, de 65 años, quien vive en Cuenca,  con frecuencia viene hasta  Guayaquil  a realizarse exámenes en la  fundación. Confesó,  que los médicos ya conocen su historial y que los costos de los servicios son bajos en relación con la calidad.

“Yo prefiero pagar y tener los resultados de los análisis de inmediato, que esperar tres o cuatro meses hasta saber qué es lo que tengo”, destacó.    El horario de atención en el Nahím Isaías es de 08:00 a 20:00, de lunes a viernes, y de 8:00 a 12:00, los sábados.

La Fundación Cristiana para la Salud (Funcrisa) es otra organización que presta servicios de salud, ellos están ubicada en el centro de la urbe y atienden   aproximadamente a 450 pacientes en dos diferentes locales.
La  especialidad más demandada es la oftalmología y los pacientesllegan desde las 09:00. Un gran número de pacientes incluso es sometido a cirugías.

Edy Ycaza, director de la fundación, señaló que cada año participan médicos ecuatorianos y extranjeros en las cuatro campañas gratuitas de cirugías de cataratas, en las que se benefician  560 pacientes. “En agosto iniciaremos la tercera campaña de este año y  celebraremos  22 años de trabajo”.

En  la siguiente campaña las consultas y operaciones relacionadas a la oftalmología serán gratuitas para todos los pacientes.

En la institución que tiene 21 años de existencia trabajan 40 médicos residentes, que laboran  en las áreas  de cardiología, endocrinología, odontología y medicina general.

“El tiempo promedio de consulta por paciente es de 20 minutos; sin embargo, cuando son simples observaciones hemos llegado a atender a personas en 5 minutos”, señaló Ycaza.

Guadalupe Cuesta, paciente de 72 años de edad que asiste a Funcrisa manifestó que  la cirugía de catarata a la que se sometió hace dos semanas resultó exitosa. “Ahora tengo que venir una vez a la semana, durante los próximos 6 meses, para que el médico revise el avance del ojo”.

En el área de farmacia los medicamentos tienen descuentos y, por lo general, llegan al establecimiento gracias a donaciones de laboratorios y médicos.

La fundación atiende casos de emergencias,  de lunes a domingo, las 24 horas, no obstante,  el horario de atención normal  es de lunes a viernes, de 09:00 a 16:00.

“Todo es bastante rápido aquí, sólo con entregar la cédula y pagar los $5, nos atienden, y cuando venimos bastante, los doctores ya conocen nuestro caso sin abrir el historial”, afirmó el paciente, Manuel Ochoa. 

Alrededor de 480 personas asisten todos los días al Dispensario de Nuestra Señora de La Alborada (Dinsa).
María Guevara conoció el lugar porque en la Iglesia Nuestra Señora de La Alborada, institución a la que pertenece la fundación, le dieron el dato.  “Vengo desde hace 7 años y siempre me han atendido bien, la atención es rápida y los precios son muy bajos”.

Con un micrófono que se oye en todo el establecimiento, llaman a los pacientes que ya van a ser atendidos, mientras en la sala de espera las enfermeras preguntan a los pacientes sobre la gravedad de los síntomas que presentan.

“En muchos casos atendemos a personas que han sido víctimas de asalto,  siempre damos preferencia a los  más graves”, contó la administradora Manuela Contreras.

Dinsa existe desde hace 10 años y abre sus puertas desde las 07:00, todos los días de la semana.
Contreras comentó que hay médicos para todo tipo de necesidad. “Tenemos odontólogos, oftalmólogos, cardiólogos, psicólogos, entre otros. Quienes   tengan alguna enfermedad, se pueden acercar al centro y pedir ayuda”.

En el lugar se realizan cirugías menores y suturan  heridas y cortadas simples.
La fundación pertenece a la Ariquidiócesis de Guayaquil y funciona como parte de una red de dispensarios llamada Fundasen.

El precio de los medicamentos dentro de la institución es igual al de otras farmacias, pero en muchas ocasiones se hace donaciones a pacientes después de un estudio socioeconómico que revele que no puede tener acceso a la medicina.

La fundación Huancavilca, ubicada en el sector Guasmo Sur de Guayaquil,  opera desde hace 18 años.
Huancavilca funciona bajo alianza con distintas instituciones como La Cruz Roja y la Junta de Beneficencia de Guayaquil.

Tiene convenios con personas destacadas en alguna actividad como la bailarina, Yesenea Mendoza, quien imparte un programa de danza a las niñas del barrio y Alfaro Moreno, quien tiene una escuela de fútbol.

Alexandra Molineros, administradora de la fundación, asegura que trabajar en alianza con distintas instituciones beneficia a la comunidad directamente.

“Al crear lazos entre fundación e institución estamos creando espacios en los que se trabaje y explore desde todas las áreas de la ayuda social”.

El dispensario médico, en conjunto con la Cruz Roja, atiende de 08:00 a 16:00. El valor de las consultas en   medicina general, pediatría y exámenes de laboratorio es de $ 3.

La institución cuenta con un programa de nutrición en el que se atiende aproximadamente a 450 niños que pertenecen al área de estimulación temprana.

“Buscamos darles a los niños un espacio donde puedan aprender cosas junto con sus padres; tenemos varias clases y horarios para darles facilidad a las mamás que trabajan”, señaló Valentina Rivera, directora del área infantil.

La fundación cuenta con diversos talleres y clases  y se encarga de organizar actividades cada mes que impulsen la unión intrafamiliar.