Aunque el ingreso sea solo por la derecha se forma una columna en cada lado. La Metrovía se aproxima, el orden desaparece. El uno empuja al otro, sin importar si se irrespeta el espacio de quien está adelante. El transporte se estaciona, un sujeto que recién llega ingresa primero y logra sentarse. De pie, en el interior del transporte, ha quedado una mujer con una niña en brazos y más de cinco adultos mayores, sujetándose a las barras. Durante el viaje, que puede ser corto o largo, algunos usuarios, en su mayoría mujeres, pueden llegar a sentirse ofendidas por la conducta del “vecino”. El ligero acercamiento del sujeto que está detrás, el constante roce, la frase que incomoda y la mano que busca la curva son acciones que carecen de respeto.

El 8 de marzo, la Fundación Metrovía desarrolló el lanzamiento de la campaña ‘Que no te toque’, iniciativa que se enfoca en detener el abuso sexual en el transporte público. La información empieza a llegar a los usuarios. Mariela Cevallos tiene 42 años y se moviliza en Metrovía desde la Terminal Río Daule hasta el centro de la ciudad. Menciona que en varias ocasiones ha sido víctima de acoso en este medio de transporte. Indica que en los últimos días los hombres con los que ha compartido el transporte prefieren girarse para evitar algún tipo de contacto.

Lissette Molina cuenta que aunque a ella ningún sujeto la ha acosado, conoce a personas que por este motivo han pasado un mal momento. Ni Mariela ni las amigas de Lissette pusieron una denuncia frente al acoso, lo único que lograron hacer fue levantar la voz para frenarlo. Marcela Camposano, comunicadora institucional de Fundación Metrovía, comenta que son pocas las denuncias por acoso que se ponen, ya que las víctimas deciden callar. (I)

Fundación para denunciar

El número de pasajeros genera malestar

En caso de sentir algún tipo de abuso, la víctima puede informar al chofer. Este activa el botón de pánico para que la policía participe y posterior a ello poder formalizar la denuncia. Además de la Policía Nacional, otras instituciones también están trabajando en esta campaña, como la Fundación María Guare y Cepam (Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer), que brindan apoyo a las víctimas de abuso sexual. (I)