La comisión de fútbol de Liga de Quito, encabezada por Rodrigo y Esteban Paz, aceptó la renuncia del preparador físico uruguayo Alejandro Valenzuela y decidió dar una nueva oportunidad al director técnico Gustavo Munúa.

En una votación dividida, el organismo rector del fútbol en el cuadro universitario resolvió ratificar al estratega charrúa, pese a que los ‘albos’ se ubican novenos entre 12 equipos en la primera división de Ecuador, con apenas 9 puntos de 36 posibles.

Por lo general, los preparadores físicos de los equipos de fútbol no suelen tener protagonismo. Esa regla encontró su excepción en Liga de Quito, pues Alejandro Valenzuela resultó ser un cuadro aparte.

Socio del entrenador uruguayo Jorge Fosatti durante su primera etapa en Liga de Quito, Valenzuela fue una de las cartas que motivó a la hinchada previa a la confirmación de Gustavo Munúa como nuevo entrenador para esta temporada.

Al ser un hombre de la casa, todos se quedaron más tranquilos, con la promesa de darle a la plantilla un plus que carecía: una ejemplar preparación física.

El profesional, sin embargo, se vio salpicado por sus declaraciones. Primeramente, el asistente dudó de la capacidad intelectual de sus jugadores, al mencionar que sus métodos eran muy avanzados para ellos.

Posteriormente prometió irse si el equipo perdía con Macará el sábado pasado.

Al final, Valenzuela terminó cediendo. Renunció a Liga y se fue entre polémica, pues adujo un problema de salud y otro personal para marcharse. La ‘U’ buscará su reemplazo de inmediato. (D)