Hinchas de Emelec viven el partido ante Aucas con alegría y nostalgia por el último encuentro del equipo Azul como local en el estadio George Capwell por remodelaciones en toda su estructura. El reducto ubicado en la Av. Quito se reabriría antes del primer semestre del 2016.

Johnny Rolando de 34 años asiste al Capwell cada vez que los eléctricos juegan en Guayaquil y para el "es una alegría muy grande venir a ver ganar al equipo y ahora siento una tristeza porque se cerrará el estadio por casi un año".

Rolando aseguró que "lo único que importa es que se recupera y se remodelar nuestra casa". Andrés Marín, aficionado ‘azul’, indicó que "para nosotros esto es un templo y es una alegría inmensa que van a transformar la Caldera en el estadio que merecemos hace años".

Este hincha de 27 años fiel al conjunto guayaquileño dice que "a pesar de que la nostalgia es grande, a donde sea que juegue el equipo lo vamos a ir a alentar como siempre lo hemos hecho". (D)