El San Lorenzo de Almagro argentino se presenta junto al Real Madrid español como favorito en el Mundial de Clubes (10-20 de diciembre en Marruecos), en calidad de representante de Sudamérica y campeón de la Copa Libertadores, que el club ganó por primera vez.

Fundado en 1906, San Lorenzo ya era conocido mundialmente por ser uno de los clubes históricos más populares de Argentina, pero su fama ha vivido un repunte en los dos últimos años, primero en 2013 por la elección del Papa Francisco, hincha confeso del Ciclón, y en este 2014 por el éxito en la Copa Libertadores.

Fue la primera vez que San Lorenzo levantaba el trofeo más codiciado del fútbol sudamericano y con ello se ganó el derecho a disputar el Mundial de Clubes.

Para Argentina será la tercera vez en el torneo, después de la presencia de Boca Juniors en 2007 y de Estudiantes de La Plata en 2009, en ambos casos derrotados en la final, por lo que el país busca su primera corona mundial en una competición donde los equipos brasileños han conseguido cuatro títulos, los único de su continente.

El estado de ánimo con el que llega San Lorenzo no es, eso sí, tan eufórico como el que tenía tras el éxito de la Libertadores. En el campeonato argentino va actualmente octavo.

Pero el equipo de Edgardo Bauza aparca ahora la batalla nacional para citarse con la historia y el reto ilusiona muchísimo al club y sus aficionados, conscientes de que son pocas las veces que se presenta una oportunidad así.

"Es el máximo torneo que puede jugar un equipo de fútbol en el mundo, no hay nada arriba de esto", dijo recientemente Bauza a la web de la FIFA.

San Lorenzo jugará todos sus partidos en el Mundial de Clubes en Marrakech, donde se estrenará el miércoles 17 contra un equipo todavía por determinar, que saldrá del duelo de cuartos que jugará el sábado 13 el ES Setif argelino, campeón de África, contra el ganador del partido inaugural, que mide este miércoles al Moghreb Tetuán, campeón de Marruecos, contra el Auckland neozelandés, monarca de Oceanía.

En caso de salir victorioso, el sábado 20 tendrá la lugar la gran final, donde casi todos esperan un pulso por todo lo alto contra el Real Madrid, el actual campeón de Europa, que también busca su primer título en el Mundial de Clubes.

El equipo llegará a Marruecos con 23 hombres entre los que se encuentra el internacional paraguayo Néstor Ortigoza, el autor del gol del triunfo (1-0) sobre el Nacional de Asunción en la vuelta de la final de la Libertadores en el Nuevo Gasómetro.

Junto a él, figuras también importantes en el camino a la Libertadores como Mauro Matos, el uruguayo Martín Cauteruccio o Leandro Romagnoli -recuperándose de una lesión en un codo-, con jugadores que han reforzado al club después, como el colombiano Mario Yepes.
Todos ellos configuran un bloque con capacidad para levantar el trofeo el sábado 20 al cielo de Marrakech y poner un broche de oro a un año 2014 inolvidable.