Nuevas condiciones, la misma aspiración: llevarse el cupo a cuartos de final. El duelo de vuelta esta tarde (17:15) en el Monumental de Núñez conmina a Marcelo Gallardo y a Pablo Repetto a trabajar sobre el contexto que dejó la ida en Quito, cuando Independiente del Valle logró sacar una ventaja de 2 goles ante un River Plate seriamente afectado por la altitud y con poca fortuna frente a la portería.

Si el fútbol fuera de profecías, a Repetto le interesaría un vaticinio en el que el destino de su equipo sea defender con orden los 90 minutos, mantener el control de la media cancha, aprovechar los espacios que dejará River en el asedio ofensivo y anotar un tanto que sentencie la llave por completo. No obstante, la suerte de Independiente sí depende de un plan y la capacidad de sus intérpretes para ejecutarlo.

El uruguayo tiene prohibido a sus jugadores repetir el cotejo defensivista que hizo en la visita a Colo Colo en la última fecha de la fase de grupos. Sí, el resultado fue el esperado. Pero los errores de definición del equipo ‘Indio’, la gran actuación del portero Librado Azcona y la fortuna determinaron el resultado. En el partido jugado en Chile, los ‘negriazules’ enfrentaron a un club con bajo promedio de goles (0,67) por partido en Copa. Hoy el rival es River, el cual posee el ataque más efectivo del certamen (17 goles), con una media de 3,6 tantos por duelo en casa.

El DT ya ha conmensurado la necesidad de no dejarse acorralar por el oponente dentro de su campo. “La presión del rival te somete y tienes que defenderte”, reconoció el estratega al referirse a lo sucedido en Santiago con Colo Colo. Pero advierte que la idea para esta tarde será “salir a buscar el arco rival y no especular con el resultado”, es así que repetiría su formación de 4-2-3-1 que empleó en Quito. La forma de lograrlo será explotando los espacios que deje River cuando busque el primer gol. Para ello será vital la capacidad de doblaje defensivo para presionar y recuperar con rapidez, así como los desdoblamientos ofensivos para sumar hombres en ataque durante el contragolpe.

Gallardo, a matar o morir

River intentará hacer valer el peso de su localía y de  las estadísticas. El ‘millonario’ nunca perdió ante equipos ecuatorianos en copas:  jugó 14 partidos, ganó 12 y empató los 2 restantes. “Este equipo tiene que sacar esa rebeldía que le queda para pasar de fase. Es una situación difícil, pero para nada complicada. Tenemos que estar convencidos de eso”, comentó el técnico Gallardo.

Por lo pronto, el ‘Muñeco’ quiere un equipo superofensivo para conseguir el pase a cuartos. Y para ello le dirá adiós al doble cinco de la ida en Quito. Ponzio sería el hombre que trabaje por delante de la línea defensiva.  

Más adelantados jugarían Andrés D’Alessandro, como enganche; el uruguayo Camilo Mayada y Nacho Fernández por los costados. Más arriba el también uruguayo Rodrigo Mora y su compatriota Iván Alonso, comandando el ataque.  La idea primaria es reforzar el poder ofensivo por los laterales.

En la defensa no hay dudas. Marcelo Barovero en el arco y una línea de 4 formada por Gabriel Mercado, Jonathan Maidana, el colombiano Eder Balanta y Milton Casco.  En los últimos entrenamientos Gallardo paró un esquema de 4-3-1-2, algo usual cuando va a jugar en casa. (I)

Barcelona dejó fuera al campeón vigente en 1992

Independiente del Valle podría convertirse en el segundo equipo ecuatoriano en eliminar a un campeón vigente de la Copa Libertadores de América. Si supera esta tarde a River Plate en Buenos Aires, se sumará a Barcelona, que en 1992 dejó en el camino a Colo Colo, que había levantado el trofeo en 1991.

En esa llave, los chilenos ganaron en la ida (30 de abril de 1992) 1-0 en el estadio Monumental de Santiago, con gol de Claudio Borghi, hasta hace poco entrenador de Liga de Quito.

En aquel equipo de Barcelona jugaban José Cevallos, Jimmy Montanero, Raúl Noriega, Claudio Alcívar, José Gavica, Gilson, Rubén Insúa y Carlos Muñoz, entre los más destacados.

Para la vuelta, el 6 de mayo, los ‘amarillos’ debían remontar para poder acceder a los cuartos de final. En el segundo tiempo llegaron los goles con los que el local ganó 2-0. El primero a los 51’, a través de Insúa, que falló el penalti pero en el rebote pudo vencer al arquero Daniel Morón.

El segundo tanto fue de Carlos Muñoz, que recibió un pase de Gavica, eludió al golero y anotó en la puerta vacía.

En ese torneo, Barcelona avanzó hasta las semifinales y fue eliminado por Sao Paulo de Brasil. (I)