El Real Madrid anunció ayer un acuerdo definitivo con el ayuntamiento de la capital española para la modernización del estadio Santiago Bernabéu con un proyecto menos ambicioso que el inicial y que tendrá un coste de unos 400 millones de euros.

Según este acuerdo, presentado en una rueda de prensa, el ayuntamiento permite que se retome el proyecto paralizado hace un año por la justicia española, mientras el cuadro blanco se comprometa a limitar las obras a la superficie ya edificada y a construir un parque de 6.000 m2 en una esquina del escenario. “Va a ser una espectacular transformación del estadio Santiago Bernabéu. Es uno de los íconos emblemáticos de Madrid y queremos convertirlo en uno de los mejores estadios del mundo”, prometió el presidente del club merengue, Florentino Pérez (foto).  

“No aumentamos la edificabilidad (...) Las oficinas las vamos a sacar a Valdebebas”, la ciudad deportiva de la institución en el noreste de la capital, y “el centro comercial se incorpora al estadio”, añadió Pérez, adelantando que quiere iniciar el proyecto “a lo largo del año próximo”.   

El presidente ‘merengue’ hizo oficial el acuerdo entre el club madridista e IPIC, un fondo de inversión del emirato de Abu Dabi, que financiará las obras a cambio del “naming” del estadio. “El precio girará en torno a los 400 millones, lo dijimos en su origen”, comentó Pérez ante la prensa, precisando que “el acuerdo que tenemos con IPIC es de este valor”. “Las instalaciones seguirán llamándose Bernabéu y podrán tener apellido”, añadió el dirigente ‘blanco’.

El Santiago Bernabéu, cuyo aforo es para 81.000 personas, debería mantener la misma capacidad, y además tendrá un techo retráctil.

El estadio fue inaugurado en 1947, antes de tomar en 1955 el nombre del emblemático presidente madridista, Santiago Bernabéu (fallecido en 1978). El recinto ha sido remodelado en varias ocasiones desde el Mundial España-1982. (I)