El Olympique de Marsella (OM) rechazó ayer “someterse a la ley de un solo hombre”, después de que el técnico argentino Marcelo Bielsa anunciara su dimisión el sábado.

“El Olympique de Marsella tiene unos valores únicos y posee una historia suficientemente rica para rechazar someterse a la ley de un solo hombre”, señaló el club en un comunicado oficial, horas después de conocer la renuncia del ‘Loco’.

“Haremos todo lo posible por ofrecer al club los servicios de un entrenador a la altura de esta responsabilidad. Pero el OM no puede en ningún caso ser prisionero de las exigencias de alguien que pone sus intereses personales por delante de los de la institución”, añadió la dirigencia del club.

Bielsa anunció su dimisión al cargo de director técnico del OM, el sábado, en la conferencia de prensa posterior a la derrota 1-0 ante el Caen, en la primera jornada del campeonato francés.

“Acabo de dimitir de mi puesto en el Olympique de Marsella”, señaló Bielsa, reprochando al club haber querido cambiar los términos del contrato que estaba a punto de firmar hasta 2017 después de dos meses de negociaciones.

El club y su propietaria Margarita Louis-Dreyfus añadieron que “tomarán en los próximos días todas las medidas necesarias para permitir al OM vivir una temporada a la altura de sus esperanzas”.

Pero esta no es la primera ocasión en que el ‘Loco’ toma este tipo de decisiones. De regreso al Atlas Guadalajara en 1997 el técnico de Rosario dimitió al inicio de su conferencia de prensa de presentación por un desacuerdo sobre la formación del equipo.

Desde el inicio de su carrera como entrenador, el argentino ha desarrollado tres características: un juego espectacular, el amor de los aficionados y el desafecto con los directivos.

Campeón de Argentina en su primera experiencia en el banquillo, con Newell’s Old Boys, el club de su corazón, perdió la final de la Copa Libertadores en 1993, en los tiros de penal frente al Sao Paulo de Raí. (I)