Publicidad
Independiente, un club que crece rápido
El “equipo revelación”, la “sorpresa del certamen”, un “protagonista inesperado” son, entre otros, los calificativos que los medios de prensa nacionales e internacionales le dan a Independiente del Valle (IDV), al que ni el más optimista de sus hinchas veía entre los 4 mejores de la Copa Libertadores de 2016 y con todas las posibilidades de pasar a la final y, por qué no, ganar el torneo.
Por su obra y gracia quedaron en el camino Guaraní de Paraguay, semifinalista de la Libertadores de 2015; Colo-Colo de Chile, campeón de la justa en 1991; River Plate de Argentina, campeón reinante de la lid y vencedor del grupo 1 del presente certamen, y Pumas de México, primero del grupo 7 en la actual competición.
Lo que a muchos llena de intriga es cómo IDV encara los partidos; no importa cuán linajudo sea el rival o si está con un estadio lleno en contra; pese a la juventud de su equipo, ya que 23 de los 30 jugadores que inscribió son menores de 26 años, y el promedio de edad es de 23 años, los muchachos han actuado con soltura dentro y fuera de casa.
Todas las clasificaciones a las rondas siguientes, el ‘rayado’ las consiguió fuera de casa. En el repechaje lo hizo tras superar a Guaraní; en la fase de grupos quedó segundo en la llave 5, dejando en el camino a Colo-Colo; en los octavos de final apeó a River Plate, y en los cuartos de final a Pumas.
Frente a Guaraní, River Plate y Pumas perdió en sus visitas, pero pasó por gol de visitante contra Guaraní, por mejor diferencia como local frente a River, y en penaltis ante el ‘felino’ mexicano, tras igualar la serie. Es decir, superó con solvencia las circunstancias que se le presentaron.
Un dato curioso dentro de este análisis es que en el desempate con Pumas, todos sus lanzadores acertaron los penaltis, sin que, según su entrenador, Pablo Repetto, sus hombres hayan practicado los disparos para la posible tanda.
Y aunque para muchos, el ‘negriazul’ ha contado con mucha fortuna, para 3 técnicos que laboran en Ecuador, la exitosa campaña de esta plantilla no es producto de la casualidad ni de la fortuna.
Octavio Zambrano, coordinador de las divisiones formativas de El Nacional, cree que si bien la nómina es joven, no es novata. Su desempeño es fruto de una maduración que comenzó en el torneo doméstico de 2012, desde cuando tomó protagonismo para, en los años posteriores, continuar codeándose por los primeros puestos con Barcelona, Emelec y Liga de Quito, considerados los grandes del país.
No llegó a campeonar, pero su producción le permitió ser vicecampeón en 2013 y acceder a la Copa Libertadores en 2014, 2015 y 2016, además de obtener boleto a la Copa Sudamericana en 2013 y 2014.
Ahí comenzó a ganar experiencia internacional y a consolidar a varios jugadores que mantiene hasta ahora, como el meta Librado Azcona, los defensas Luis Ayala y Luis Caicedo, y los volantes Jéfferson Orejuela y Gabriel Cortez.
Con ellos se complementaron bien los incorporados Julio Angulo (2013), Bryan Cabezas (2014), Arturo Mina (2014), el retornado Junior Sornoza, que estuvo en el elenco en el período 2011-2014 y regresó en 2015, Jonny Uchuari (2016), los uruguayos Christian Núñez (2014) y Emiliano Tellechea (2016), y José Angulo, quien pasó al equipo de primera en 2015, aunque está en IDV desde 2011.
Para Zambrano, buena parte del éxito de este conjunto es el respeto que la dirigencia tiene con el trabajo del estratega Repetto, a quien no se le ha exigido salir campeón local, sino, más bien, se le ha permitido corregir errores y continuar.
“Los reales procesos futbolísticos toman, al menos, 4 años. No lo digo yo, lo dice Josep Guardiola. Esa es la diferencia entre IDV y el resto de equipos del país”, enfatiza.
Se refiere a que en el ‘rayado’, cuando han salido elementos, se ha recurrido a la cantera. De lo contrario, con la ida de Cristian Leonel Ramírez, Fernando Guerrero, Mario Pineida, Daniel Angulo y otros, su planificación habría fracasado.
En Independiente del Valle, los jugadores de las divisiones de base saben que tendrán más posibilidades de actuar, lo que no ocurre en otros representativos, en los cuales se prefiere fichar a futbolistas consolidados, nacionales o extranjeros, para suplir a los que se van. A veces se vincula a figuras con sueldos altos, como si aquello garantizara la consecución de propósitos.
“En IDV hay un sentido de pertenencia, una mística que mantiene unido al grupo”, reflexiona.
Con parte de lo dicho por Zambrano concuerda Carlos Sevilla, timonel de Fuerza Amarilla, que en 2011 y parte de 2012 manejó al ‘negriazul’. En su época se afianzaron Azcona, Caicedo, Cortez, Orejuela, Sornoza, etc.
Añade que los futbolistas se desarrollan jugando fútbol, por eso es fundamental que Independiente les dé esa chance a los que ascienden de las categorías de base. Además, concuerda que esta institución no solo los forja como deportistas, sino que a través del colegio que funciona en su complejo, les brinda orientación académica.
Tan importante como eso, prosigue, es que las divisiones formativas, gracias a los directivos, tienen la oportunidad de participar en bregas internacionales; muestra de aquello es que en las 3 ediciones de la Copa Libertadores Sub-20 en 2011, 2012 y 2016, el representante ecuatoriano ha sido IDV.
“Desde ahí ya ganan roce internacional. Es interesante que los directivos viajen a conocer los métodos de trabajo formativo en el Manchester United, Barcelona FC, Corinthians o Gremio, para adaptar lo positivo a su proyecto”, subraya.
Un recuerdo que confirma su tesis de dar prioridad a las bases es cuando en 2001 quedó campeón nacional con Emelec. Aquella temporada triunfaron los jóvenes, a quienes se llamó “extraterrestres”. La idea fue rentable, porque se consiguió el título con un presupuesto más bajo que en los años anteriores.
Jorge Célico, director técnico de Universidad Católica, concuerda con sus colegas en brindar todo el apoyo a los procesos y en invertir en las inferiores, ya que ese es el verdadero patrimonio de un club.
A su criterio, los logros de Independiente del Valle en la Libertadores 2016 son la cosecha de la espera y la seriedad que toda empresa debe dar a sus propósitos.
Se nota que en IDV se tienen los objetivos claros, agrega el instructor argentino, y se manejan bien las presiones internas y externas. Sobre las presiones, piensa que podría ser una ventaja para sus atletas el hecho de no tener una hinchada numerosa y, por ende, no ser tan mediáticos como en otras entidades.
En este punto, opina que Repetto ha sabido tener con los pies en la tierra a los jugadores; pero es indispensable que así se mantengan, pues es probable que con estos triunfos, los medios ensalcen a los deportistas y con ello se corra el riesgo de que algunos se desubiquen en razón de la fama, algo que podría ser contraproducente.
Al consultarle sobre la figura más descollante del ‘rayado’, responde que es el equipo, con una columna vertebral integrada por Azcona, Mina, Orejuela, Sornoza y José Angulo, pero bien complementada por los demás. “Hay excelentes individualidades, pero prevalece el juego de conjunto”, cita. (I)
Un equipo modesto a la altura de los poderosos del continente
La clasificación de Independiente del Valle a las semifinales de la Copa Libertadores de América demuestra cómo un equipo modesto y sin un gran presupuesto puede ponerse a la altura de los poderosos del continente e instalarse entre los cuatro mejores clubes de la región.
El año pasado Guaraní llegó hasta esa instancia, donde cayó con River Plate, pero Nacional de Asunción, en 2014, fue más allá al alcanzar la final frente a San Lorenzo de Almagro.
La hazaña de los dirigidos por el estratega uruguayo Pablo Repetto remite a otros grandes y sorpresivos rendimientos en temporadas anteriores, los que se reseñan a continuación, tomando como punto de partida la edición 1988, cuando el certamen tomó el formato actual, con eliminación directa desde octavos de final.
Danubio 1989
Tenía como antecedente apenas dos participaciones en Copa Libertadores (1978 y 1984) con sendas eliminaciones en primera rueda. En la edición 1989 debía medirse en el grupo con Peñarol, Bolívar y The Strongest. Comenzó con un impactante 4-1 sobre Peñarol y se clasificó segundo detrás de éste. En octavos lo esperaba Nacional, el otro grande de su país y campeón defensor. Fue 0-0 en la ida y un inolvidable 3-1 en la revancha, con goles de Daniel Sánchez, Gustavo Dalto y Rubén Da Silva. En cuartos superó con autoridad a Cobreloa, venciendo en los dos cotejos: en Calama 2-0 (Dalto – Da Silva) y el desquite 2-1 (Da Silva – Dalto). El inolvidable recorrido de este equipo dirigido por Ildo Maneiro concluyó en la semifinal ante Atlético Nacional de Medellín, que sería el campeón del certamen.
Sao Caetano 2002
Avanzó en el disputado grupo 1, donde luchó hasta la jornada final por una de las dos plazas junto a Cobreloa (el otro clasificado) y Cerro Porteño. Desde el comienzo se notó la calidad de Marcos Senna en la mitad de la cancha y la potencia ofensiva de Brandao. En octavos de final superó por penales a Universidad Católica de Chile por 4-2, tras dos empates 1-1, cuando el arquero Silvio Luiz contuvo el último ejecutado por Ormazabal y Daniel le dio el pasaporte a cuartos. Allí se midió con Peñarol y nuevamente fueron los penales los que sellaron su pasaporte a una nueva instancia, en este caso por 3-1, ya que su rival malogró tres de los cuatro que ejecutó. El sueño del cuadro dirigido por Jair Picerni no se detuvo allí, porque llegó a la final tras eliminar en semis a América de México. En el match decisivo ante Olimpia ganó 1-0 en Asunción, perdió 2-1 en el Pacaembú y los penales, aliados en fases anteriores, le dieron la espalda en el momento crucial. Igualmente, nadie olvida la hazaña del humilde Sao Caetano.
Once Caldas 2004
Aquella edición de la Copa Libertadores estaba plagada de equipos históricos. Nada menos que 11 campeones tomaron parte y la mayoría aventuraba que entre ellos estaría el vencedor. Pero se equivocaron. El preciado trofeo viajó hacia Manizales, gracias a la leyenda que tejió el Once Caldas dirigido por Luis Fernando Montoya. Tras ganar el grupo sin sobresaltos, eliminó en octavos a Barcelona por penales, donde Henao empezaba a mostrar sus dotes de héroe al contener el remate de Chatruc.
Luego dejó en el camino a Santos, donde Arnulfo Valentierra fue la figura al marcar el gol del empate sobre la hora en Brasil y el único de la victoria como local 1-0. En semifinales logró un importante 0-0 como visitante en Sao Paulo. La revancha parecía estar destinada a los penales por el 1-1, pero Jorge Agudelo sobre la hora batió a Rogerio Ceni para llegar a la final. Y allí, contra todos los pronósticos, se dio el gusto de ser campeón, doblegando al casi imbatible Boca Juniors del estratega Carlos Bianchi.
Cúcuta Deportivo 2007
Durante toda la fase de grupos luchó por la clasificación y la logró en forma agónica, ganándole por 4-3 a Deportes Tolima como visitante con gol de Blas Pérez y desplazándolo del segundo puesto. Ese triunfo pareció tonificarlo, porque en la ida de octavos goleó a Toluca 5-1 y no le hizo mella perder la vuelta 2-0. En los cuartos se enfrentó al siempre difícil Nacional de Montevideo, pero lo superó con calidad: 2-0 (Macnelly Torres – Blas Pérez) en la ida y 2-2 (Rubén Bustos – Lionard Pajoy) en la revancha. El cuadro de Jorge Luis Bernal siguió con esa tendencia al doblegar a Boca Juniors 3-1 en la primera semifinal, pero en el desquite cayó 3-0 en la ‘Bombonera’, en un recordado y atípico cotejo disputado ante un manto de niebla. Pero nada pudo tapar esa brillante campaña. (I)