Fuerza Amarilla, que cumple su primera incursión internacional, luchará por el decoro ante el chileno O’Higgins en el desquite, hoy (19:45) en Guayaquil por la fase inicial de la Copa Sudamericana.

El modesto club, fundado en 1999 y que hizo su debut profesional en 2016, cayó por 1-0 ante la ‘celeste’ de Rancagua el 28 de febrero pasado, por lo que requiere ganar por una diferencia de dos tantos para seguir en competencia.

La ‘Banana Mecánica’ se enfrentará al ‘Capo de Provincia’ cargando su incómoda posición en el torneo ecuatoriano, en el que marcha en décimo lugar.

“Los errores propios que hemos tenido nos han costado los partidos, y eso sí me tiene muy preocupado”, dijo el técnico de Fuerza Amarilla, el uruguayo Marcelo Fleitas.

“No podemos cometer los mismos errores”, agregó el estratega, de cara al choque con el combinado chileno, que se escenificará en el remozado estadio Capwell de Guayaquil, de Emelec. La escuadra machaleña quería jugar en el estadio 9 de Mayo de la ciudad, pero al no contar con iluminación no podrá hacerlo.

“El elenco chileno está bien, con muchas ganas, con mucha ilusión”, manifestó su timonel, el argentino Cristian Arán, en rueda de prensa en el puerto guayaquileño, donde entrena desde el lunes pasado.

Arán agregó que la escuadra está disfrutando su segunda participación consecutiva en la Copa Sudamericana, lo que además le acarrea una gran responsabilidad y la presión de llegar a la segunda etapa del torneo chileno.

En 2016, O’Higgins fue eliminado en el arranque al perder por 5-4 ante el uruguayo Wanderers con tiros desde el punto penal tras empatar 0-0 en los cotejos de ida y vuelta.

El técnico ‘gaucho’ destacó que no debe ser un condicionamiento el jugar en el caluroso y húmedo clima de Guayaquil para las ganas de continuar disputando el certamen a costa de Fuerza Amarilla.

El conjunto ecuatoriano también está apremiado debido a que, aparte de su mala campaña, deberá disputar dos cotejos en 48 horas: contra O’Higgins el miércoles y con Emelec el viernes, por el campeonato nacional.

“Hoy por hoy estamos pensando en el miércoles”, apuntó Fleitas, para quien “es una locura jugar a las 48 horas”, más aún cuando el último sábado actuó ante River Ecuador, cayendo por 2-0.

“No voy a llegar con el plantel titular, por lo que va a ser otro equipo para el viernes”, señaló el entrenador, cuya meta es evitar el descenso  en la competición local tras asumir el cargo en marzo.

“Vamos a pelear el descenso hasta fin de año y es una realidad. No vamos a mentirle a la gente ni a los directivos. Trataremos de cerrar lo mejor posible la primera etapa y de ahí reforzarnos. Encima debemos pelear contra dos grandes del fútbol ecuatoriano, como Liga de Quito y El Nacional, que también están en una situación incómoda”, agregó el estratega. (I)