Donald Sutherland, de 80 años, y Kiefer Sutherland, de 49, tienen casi 275 créditos y 85 años de experiencia en conjunto, y de algún modo solo han compartido la pantalla en tres ocasiones.

La primera fue en ‘Max Dugan returns’ (‘Como caído del cielo’) de 1983. La segunda en ‘A time to kill’ (‘Tiempo de matar’) de 1996.

Y ahora en el western comparten en ‘Forsaken’, que se estrenó ayer en salas de cine y por TV pagada. Ahí los Sutherland no solo aparecen  juntos en pantalla sino que por primera vez interpretan a padre e hijo.

“He querido actuar con mi papá desde que empecé en esta profesión. Había tres actores a los que admiraba cuando estaba en la escuela: mi papá, Gene Hackman y Robert Duvall”, afirma Kiefer, quien interpreta al asesino John Henry Clayton, quien intenta reanudar la relación con su padre William Clayton, el reverendo del pueblo, interpretado por Donald.

“No es que hayamos podido hacer la película antes, si hubiésemos podido la hubiéramos hecho. Estoy muy contento de que no la hicimos más tarde. Es muy posible que yo no hubiera estado aquí (se refiere a un fallecimiento)”, sostiene Donald, quien en el último lustro ha interpretado al dictador Snow en la saga de ‘Los juegos del hambre’.

La película, que se proyectó por primera vez en el Festival de Toronto de 2015, está dirigida por John Cassar y en ella también actúan Demi Moore, Brian Cox, Siobhan Williams y otros. (I)