Publicidad
Hasta anoche, los mejores resultados del equipo abanderado en suelo rioplatense habían sido el 2-2 en la copa América de 1983 y el 1-1 de 2008 en las eliminatorias del mundial Sudáfrica 2010
Ecuador se agranda
Dos golpes de gracia y, por primera vez en la historia dentro de un torneo oficial, Ecuador tumbó a Argentina en Buenos Aires. El ‘K.O.’ de la ‘Tricolor’ sobre la ‘albiceleste’ en la verde lona del estadio Monumental de River Plate, se produjo con tantos de Frickson Erazo y Felipe Caicedo, a los 81 y 82 minutos.
Ni al más escéptico de los argentinos se le pasó por la mente que su combinado caería derrotado ante un elenco al que consideraban inferior y al que siempre dominaron en condición de locales.
Antes de este compromiso, las estadísticas en eliminatorias indicaban que de los 12 cotejos jugados entre sí, Argentina venció en 7 ocasiones y Ecuador en 3, terminando empatados los otros 2 cotejos.
Los cálculos de los aficionados y de la prensa rioplatense eran desfavorables para la plantilla de su compatriota Gustavo Quinteros, al punto que antes del duelo las apuestas eran favorables 8-1 para Argentina y en la víspera, la Asociación Argentina de Fútbol (AFA) indicaba en una nota que desde hacía 40 partidos su combinado no perdía en el Monumental.
La última derrota en aquel escenario se inscribió el 5 de septiembre de 1993, con el fatídico 5-0 que Colombia le facturó en el marco del certamen clasificatorio a la Copa del Mundo ‘Estados Unidos 94’.
Pero anoche, ni esos argumentos ni el primer lugar que la bicampeona global ostenta en el ranking de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA), le sirvieron al dueño de casa para detener el acertado toque de balón de los ecuatorianos, quienes tuvieron en Antonio Valencia un auténtico ‘motor’ de fórmula uno, imposible de detener.
Como en sus mejores tiempos, el lagoagreño marcó bien y, cuando no puso pases gol, trasladó la pelota con gran vértigo, manteniendo desconcertados a los volantes y defensas del cuadro anfitrión.
La estela que el ‘Toño’ dejó en Buenos Aires pone en entredicho las peticiones de varios hinchas del Manchester United, quienes a lo largo de esta semana sugirieron su salida del club inglés, al que arribó en 2009.
El amazónico apareció como el mejor intérprete de la estrategia planteada por Quinteros: presionar desde el área contraria, defenderse con la pelota en posesión y articular arremetida tras recuperar el instrumento en los ataques contrarios.
El acoso ecuatoriano incomodó tanto a Argentina, que jamás sometió a su rival con acciones colectivas y menos con genialidades individuales. Los intentos de Ángel Di María y Sergio Agüero por la banda derecha no tardaron en ser controlados por la zaga visitante, que suplió los sustos de los primeros 15 minutos por una cobertura casi impecable.
La salida por lesión de Agüero, para dar paso a Carlos Tévez a los 19 minutos tampoco aumentó el peso ofensivo del dueño de casa que se quedó sin ideas, brindando un espectáculo monótono y predecible.
Con un caminar parecido al de un padre primerizo en la sala de espera, el timonel de Argentina, Gerardo el ‘Tata’ Martino, no paró de dar indicaciones a sus elementos. Nunca encontró la fórmula para vulnerar el pórtico del intachable cancerbero Alexánder Domínguez.
Los pocos intentos de Tévez, Di María, Ángel Correa y en su momento Javier Mascherano, se disiparon por encima del horizontal, por los costados o quedaron en manos del guardavallas antagonista.
Ecuador, en tanto, mostró la tranquilidad necesaria como para adueñarse del escenario y solventar sus necesidades en todos los sectores del campo. Walter Ayoví pareció ser el hombre elástico, desplegándose por izquierda hacia el área del meta Sergio Romero y volviendo a su posición normal con la ductibilidad de un resorte.
En la defensa, Erazo, Gabriel Achilier y Juan Carlos Paredes apagaron todo fogonazo que pretendió encender la ofensiva argentina. En la mitad, Cristian Noboa y Pedro Quiñónez complementaron oportunamente las labores de destrucción del juego adversario o la construcción de la ofensiva.
Y finalmente, Miller Bolaños, Jéfferson Montero y Felipe Caicedo colaboraron en la cobertura, y se juntaron para preocupar a la última línea local.
El desempeño tricolor terminó por ganarse los aplausos de los espectadores, que en los minutos finales cantaron oles en contra de su selección, maniatada por la eficacia ecuatoriana.
Las acciones de gol ocurrieron en el anochecer de la lid y también le dieron la razón a Quinteros, pues en ellas participaron 2 de sus 3 variantes: Fidel Martínez y Segundo Castillo, que reemplazaron a Miller Bolaños y Pedro Quiñónez.
A los 81 minutos, Castillo pivoteó un tiro de esquina despedido por Martínez y Erazo puso la cabeza para empujar el balón a las mallas. Y a los 82, una asistencia de Valencia después de una espectacular corrida, terminó con un remate de Felipe Caicedo, que volvió inútiles los esfuerzos del arquero Romero.
Coincidencialmente, como hace 22 años, en esta caída con Ecuador, Argentina no contó con su mejor futbolista, Lionel Messi. En aquella ocasión contra Colombia no estuvo Diego Maradona. Sin embargo, ni la derrota del 93 ni la de anoche se respaldan en aquello, simplemente, la ‘albiceleste’ fue superada por mejores desempeños colectivos y hombre por hombre. (I)