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El candidato que defiende el medio ambiente
Alfredo Carrasco Valdivieso es candidato a asambleísta provincial de las parroquias de Pichincha por la coalición Partido Socialista y movimiento Concertación.
Es Máster en Administración de Empresas con especialización en Manejo de Recursos Naturales (INCAE, Costa Rica), ingeniero Geólogo (Escuela Politécnica Nacional).
Ha trabajado en Bolivia, Perú, Honduras, Guatemala, Belice y Antártica.
Tiene experiencia en gestión de áreas protegidas, recursos naturales, ordenamiento territorial, gestión de riesgos, monitoreo, así como diseño de estructuras institucionales en el sector de medio ambiente.
Además, ha trabajado en la administración de entidades públicas, empresas y ONG y es experto en la preparación y coordinación de programas de cooperación internacional.
Carrasco.
Candidato, usted tiene un largo CV con temas vinculados la defensa ambiental y defensa recursos naturales. ¿Cuáles son sus propuestas para la Asamblea?
Mi enfoque es ambiental: fui Subsecretario de Ambiente y conozco muy bien el tema. Tenemos una riqueza natural enorme en este país, el 20% del territorio está bajo el Sistema Nacional de Áreas Protegidas.
Mi propuesta es una ley para crear el Instituto Nacional de Áreas Protegidas con autonomía y financiamiento propio. Debemos ser recíprocos con la naturaleza y fortalecer la administración y eficiencia en la gestión de nuestros recursos naturales.
Por ejemplo, en el manejo hídrico hay un candidato que quiere exportar el agua, pero en Ecuador se malgasta y contamina ese recurso. En Quito Metropolitano, en el río San Pedro, el Machángara se depositan las aguas servidas.
Esas cargas contaminantes van aguas abajo, al río Guayllabamba, eso no es justo para las actividades económicas ni recreativas de quienes viven allí.
¿Entonces qué plantea?
Establecer un fondo para la limpieza de los ríos y el tratamiento de las aguas servidas e identificar mecanismos de financiamiento para ello. También dar incentivos a las empresas para que se comprometan en cuidar ese recurso natural.
En el caso de Quito Metropolitano hay un proyecto sobre las aguas del río Machángara que lleva 15 años en planificación. Cada año que pasa es más caro y tendremos que endeudarnos para pagar esa reparación ambiental.
Propongo una acción integral del manejo de las aguas en Ecuador: las juntas parroquiales, municipios y prefecturas tienen una gran responsabilidad en su gestión y manejo, pero el Estado de apoyar para que esa gestión sea eficiente.
¿Su propuesta implica reformas al COOTAD que ya ha sido modificado?
Sí, se requiere asegurar mecanismos administrativos y de ordenamiento territorial para el uso del suelo, los procesos forestales y la recuperación áreas degradas para mitigar, entre otros temas, el cambio climático.
Esto está asociado a la seguridad alimentaria, no se puede perder espacios importantes de zonas de cultivo.
La revisión del COOTAD es indispensable para impedir una ampliación de la macha urbana sin ningún criterio. Este país debe tomar definiciones sobre el uso del suelo, por ejemplo donde se puede o no hacer minería.
Es una agenda pendiente pero que debe ser implementada
Usted tiene otro proyecto para las comunidades.
Hace 18 años apoyo a las comunidades y es necesario dar valor a sus artesanías. Esto es algo que no se ha consolidado como proyecto de Estado en este país. Por ejemplo, a los artesanos de mazapán en Calderón o los cedazos en Guangopolo no se puede perder esa riqueza. A este importante sector es imperioso apoyarlo con acceso a crédito en condiciones favorables, capacitación para agregar más valor y programas de difusión.
Pero si llega a la Asamblea se topará con que pesan los intereses políticos y los de los partidos, no los del país.
Soy coherente con lo que he predicado y lo sostendre. Tengo compromiso con el Yasuní: fui para definir los límites de la zona intangible de Yasuní; así como presidí la Junta de Manejo Participativo de la Reserva Marina de Galápagos y prohibí el uso del palangre, que ahora quieren retomar bajo otro nombre.
Tendré que pelear por los intereses de los demás y por la defensa a la naturaleza.