Faltan pocos días para que comience el Mundial de Rusia en el que no estará presente nuestro país. El fútbol, y todo lo que se genera alrededor, parece ser lo único que importa. Sin embargo, hay otros deportes en los cuales Ecuador sobresale. Son deportes que no mueven los millones de dólares del balompié solo tras la venta de un jugador de un club a otro; al contrario, las otras disciplinas son el resultado del trabajo individual, de la perseverancia.

Se sabe que Carchi es la que genera el mayor número de deportistas que se dedican desde niños al ciclismo, tal como ocurre con Richard Carapaz que, hasta hace muy poco, no tenía auspiciantes y que luego de su exitosa participación  en el Giro de Italia se convirtió en el mayor orgullo de su provincia y de Ecuador.

Ecuador está participando en los XI Juegos Suramericanos de Cochabamba, Bolivia, y nuevamente vemos cómo se van consolidando figuras en varias competencias deportivas. Frente a potencias deportivas sudamericanas, como Argentina, Brasil y Colombia, allí están los representantes ecuatorianos cosechando medallas. Entre 11 equipos, Ecuador está en la sexta posición y con posibilidades de remontar.

La sorpresa de la jornada del miércoles fue de Esteban Enderica, un cuencano que, al igual que sus hermanos, mantiene siempre en alto la natación. La crónica del periodista de Medios Públicos que cubre el evento en Cochabamba narra la admiración de quienes asistieron a presenciar la exigente prueba de 1.500 metros. Esperaban que el triunfo fuera para Brasil o Bolivia y terminaron aplaudiendo el oro que ganó el “tricolor”.

En pesas ya parece que es común que una ecuatoriana se lleve el oro, y eso ocurrió con Alexandra Escobar, una esmeraldeña de 38 años, en los 58 kilos. Y así se van forjando las historias de los atletas nacionales que olvidan sus propias limitaciones para representar al país y buscar siempre un lugar en el podio. Es muy importante el apoyo que se está dando a nivel oficial a través del Ministerio del Deporte. La delegación cubre la mayoría de disciplinas y todo el país solo espera que la cosecha de medallas sea fructífera. (O)