Las lluvias caídas en las primeras semanas de 2019 causaron deslaves en el kilómetro 68 de la vía Alóag-Unión del Toachi, más conocida como Alóag-Santo Domingo.

El Gobierno de Pichincha amplía la ruta desde 2007. Pero la estabilización de taludes y construcción de túneles para evitar los deslizamientos está pendiente por falta de recursos, según el organismo.

La carretera por la que circulan mensualmente, en promedio, 315.000 vehículos, es la conexión principal entre la Costa y la Sierra, y su cierre genera problemas.  

¿Qué obras planificaron para estabilizar la carretera?
Teníamos un contrato de 2007 que contemplaba la ampliación desde el peaje de Alóag hasta Tandapi. En ese contrato hay dos tramos críticos de ampliación, que van del kilómetro 20 al 26. En ese sector estaban contemplados dos túneles: Bombolí y Cresta de Gallo. Hasta esa fecha no teníamos financiamiento, pero quedaron programados. Esa ampliación se concluyó (sin los túneles) y firmamos un contrato en 2015.

¿Para cuándo quedó el tema de los túneles?
El contrato de 2015 incluía la construcción del túnel Bombolí, para lo que se preveían $ 51’685.000; actualizamos costos y ahora se requieren casi $ 70 millones. Otra parte de las obras es la ampliación desde Tandapi hasta Unión del Toachi (límite con Santo Domingo de los Tsáchilas) -26,5 km-. En esto se invierten $ 58’237.940.

La otra parte es la intervención de los taludes, para lo que se presupuestaron $ 10 millones. Otro elemento es seguridad vial, para lo cual se tienen $ 11,5 millones. Mantenimiento rutinario $ 58 millones, periódico $ 64 millones. En total $ 252’865.872.

¿Cuánto se avanzó en el tema de trabajo en taludes?
En 2011 y 2012 hicimos un diagnóstico que estableció taludes críticos, de medio riesgo y riesgo bajo. En base a esa información, el Gobierno provincial contrató el diseño de los taludes.

Pero en el año 2016 nos retiraron la competencia desde el kilómetro 72 hasta el 101 y se la asignan a Santo Domingo de los Tsáchilas. En abril de 2017 esa provincia inició el cobro de su propio peaje. Esto disminuyó los ingresos y desfinanció el contrato. Incluso se suspendió la ampliación por un tiempo.

¿Qué alternativas se manejan para ampliar la carretera?
Hemos hecho corridas financieras para liberar fondos del primer contrato de ampliación. Y tenemos la proyección de que el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) nos ayude con la construcción del túnel Bombolí. Eso liberará muchos recursos. Además, consultamos al MTOP para ver si podemos intervenir taludes con los $ 40 millones que nos dieron para continuar la ampliación.

¿Cuáles son los sectores más críticos de la ruta?
El kilómetro 25 (se intervino  la parte alta), el km 28 (ahí se necesitaría otro túnel), el km 34 (se terracearía la parte superior y se estabilizaría el talud con malla), el km 42, sector de la quebrada Negra, el km 54, km 58. En cuanto esté completa la corrida financiera firmaremos un contrato complementario para atender estos puntos. A ellos se suman los sectores Bombolí y Cresta de Gallo.

Si se concreta el financiamiento estatal para el túnel Bombolí, ¿quedarán pendientes, entonces, dos túneles más?
Vamos a hacer un análisis en el caso del kilómetro 28 para saber si es posible únicamente estabilizar el talud y evitar la construcción del túnel por el costo. En el sector Cresta de Gallo también vamos a estudiar si podemos ampliar la vía (hacia el abismo), usar  puentes. Porque los recursos no son suficientes para construir túneles. (I)