Ecuador, 27 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Los pacientes del hospital oncológico solón espinosa ayala siguieron el cotejo ecuador-francia

La convalecencia no les impidió animar a la Selección (Galería)

Leonor Campués (izq.), amiga, y Juana Lema, madre de Jonathan Oyagata, visitan al joven paciente mientras él observa las acciones del cotejo Ecuador-Francia. Foto: Álvaro Pérez.
Leonor Campués (izq.), amiga, y Juana Lema, madre de Jonathan Oyagata, visitan al joven paciente mientras él observa las acciones del cotejo Ecuador-Francia. Foto: Álvaro Pérez.
27 de junio de 2014 - 00:00 - Por Javier Tamba Guzmán

- Creo que no vamos a clasificar.

- ¿Crees? Solo necesitamos un gol.

- Ya no queda tiempo ni para un gol. La Selección no va a clasificar a octavos. Pero Tahis, ella sí va a clasificar, va a ganarle a la enfermedad. Y por goleada.

Ante la mirada de su suegra, Patricia Cárdenas (46 años), Alexander Chalá (25 años) abrazó a su hija de 2 años. Al frente, en el televisor se anunciaba que el cotejo Ecuador-Francia estaba por finalizar. Los minutos adicionales expiraban y con ellos la participación de la Tricolor en la Copa Mundial Brasil 2014.

La competencia que no termina es la de los pacientes del hospital oncológico Solón Espinosa Ayala de Quito, quienes a diario juegan su propio partido contra el cáncer. A ellos, igual que al resto de ecuatorianos, la presencia del equipo abanderado les sirvió de motivación, pues, tal como en el fútbol, ganar no siempre es lo importante, sino dar lo mejor en cada lucha.

De la angustia a la incertidumbre

La hora del duelo coincidió con el horario de visitas. Juana Lema (43 años) llegó a la habitación de su hijo. Sabía que en esta ocasión él dividiría su atención entre ella y la TV. Con el brazo derecho vendado y el izquierdo conectado a la bomba de infusión, Jonathan Oyagata (18 años) traía enfundada la camiseta de la ‘Tri’. Las acciones de la lid lo tenían a mal traer. Un remate del francés Griezmann, tras una combinación entre Benzema y Sissoko, erizó la piel del aficionado. Persistentes, los franceses buscaban la portería nacional.

En el cuarto de al lado 2 hinchas padecían una angustia similar a la del joven otavaleño. Pascual Shucad (77 años) y Alejandro Gualotuña (66 años) criticaban la pasividad del árbitro central, consideraban que ‘Les Bleus’ eran demasiado rudos con los ecuatorianos.

A los 22 minutos, una avivada de Énner Valencia, que se escapó de 2 zagueros, hizo suspirar a don Alejandro. El remate del esmeraldeño se fue por un costado. Seis minutos después la incertidumbre encendió los ojos de don Pascual. El volante Christian Noboa era atendido por un corte en la cabeza. Gracias al Mundial, estos hombres olvidaban por instantes los motivos de su hospitalización. Cuando se le preguntó a don Alejandro cuál era su diagnóstico (clínico), entre risas precisó que la cobertura de Ecuador era muy vulnerable y que le faltaba vocación ofensiva.

Don Pascual, a quien le detectaron a tiempo un tumor maligno en el estómago, opinaba que la actuación del golero Alexander Domínguez era lo más rescatable. Su hija Ascencia (40 años), que siempre está pendiente de él, concordaba con aquella apreciación.

Mientras la quimioterapia de don Pascual estaba por terminar, empezó la segunda etapa. La noticia del triunfo parcial de Suiza 2-0 sobre Honduras entristeció a los seguidores de la Tricolor. La expulsión de Antonio Valencia a los 48 minutos los desalentó aún más. Todo conspiraba, la ansiada clasificación a segunda ronda poco a poco se alejaba de su imaginación.

Hay que cambiar de DT

Más interesada en los gestos de su padre que en la televisión, Tahis lo observaba ‘enchufado’ al desarrollo del compromiso. Alexander Chalá se reconoció como un pelotero consumado, quien sufre cuando pierde la Selección. Lo que ocurría tenía un responsable obvio: el director técnico Reinaldo Rueda que, a su juicio, no debe continuar.

Junto a la cama de Tahis, Francisco M. (13 años) y su hermana Nicole (14 años) también se concentraban en el duelo. Una clara oportunidad de Christian Noboa a los 54 minutos hizo que Francisco incline el cuerpo hacia adelante. “¡Yaaaa! ¡Chuta! Si pateaba un delantero holandés seguro era gol”, mencionó el chico, quien a esas alturas del match anticipaba la eliminación de Ecuador en primera fase.

Francisco, cuya pierna izquierda fue operada hace 2 semanas debido a la detección de osteosarcoma, pronunciaba su inconformidad con el desempeño de Ecuador. Ni las atajadas de Domínguez ni los desbordes del ingresado Renato Ibarra lo conformaban. Para él, Ecuador perdió su mejor chance en el choque contra Suiza.

Sin comprender de cambios ni de entrenadores, a pocos metros, Bryan A. (6 años) no despegaba su mirada del televisor. El balompié es su pasión ¡Cómo extraña volver a las canchas! Con menos gusto por el rey de los deportes, Viviana, su madre, lo acompañaba.

La ‘Tri’ no pasó a la segunda ronda, pero el lance más importante de Bryan sigue con intensidad. Ya venció una vez, pero la leucemia pidió revancha. “Él es valiente, quiere curarse, hace todo lo que se le ordena”, contó doña Viviana.

Los hinchas invidentes están tristes por la ‘Tri’

Los miembros de la Federación Nacional de Ciegos del Ecuador (Fence) no se perdieron los partidos de la Selección Ecuatoriana en el Mundial de Brasil. Y aunque los resultados no fueron los esperados, aspiran a que dentro de 4 años la bandera tricolor vuelva a flamear en una cita planetaria. La eliminación de Brasil 2014 es el inicio del camino hacia Rusia 2018.

El mejor recuerdo que les quedó de la cita en el ‘país del carnaval’ es el triunfo 2-1 sobre Honduras. Aquel día, 16 socios se reunieron en la sede de la institución (avenida Veintimilla y calle Juan León Mera) y escucharon a todo volumen las acciones del compromiso.

Los otros encuentros los monitorearon en sus respectivos domicilios. Édison Dávila, uno de los más entusiastas, evidenció su pena por la no continuidad de la ‘Tri’ en la competencia, pero confesó que ya se lo temía, pues el funcionamiento de Ecuador en el primer compromiso (frente a Suiza) dejó muchas dudas. Le dolió en el alma el tanto de Haris Seferović en los minutos de descuento para el 2-1 en contra de la ‘Tri’. Desde ahí, Ecuador dependía de otros resultados para continuar con vida en el torneo. Todo se complicaba.

Lo único bueno de la eliminación para él es la parrillada que le ganó a su compañero Darío Chuquilla, quien confiaba en el paso del combinado a los octavos de final. “Yo aposté que sí clasificábamos, pero no fue así”, expresa Darío. Al igual que el resto, los hinchas invidentes esperan ansiosos el inicio de las eliminatorias para el Mundial ruso.

Para estar siempre al día con lo último en noticias, suscríbete a nuestro Canal de WhatsApp.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media