Ecuador, 29 de Abril de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

En los atunero existe mayor preocupación por el tema del barniz

Las normas garantizan la calidad de los productos

En  la feria Encadena Ecuador 2014, el ministro de Industrias recorrió los pabellones con productos de fabricación local. Foto: Lylibeth Coloma |  El Telégrafo
En la feria Encadena Ecuador 2014, el ministro de Industrias recorrió los pabellones con productos de fabricación local. Foto: Lylibeth Coloma | El Telégrafo
05 de marzo de 2014 - 00:00 - Redacción Economía

El proceso de sustitución de importaciones, que comenzó como una política normativa con la emisión de resoluciones y reglamentos técnicos a finales del año pasado, se ha convertido en uno de los más polémicos en el ámbito económico del país y ha contrapuesto a dos segmentos bien definidos: el que lo observa como una oportunidad para producir y el que lo considera, aunque positivo, precipitado por la rapidez con que se lo busca ejecutar.

Una de las resoluciones más polémicas fue la 116, tomada por el Comité de Comercio Exterior (Comex) en noviembre y que exige la presentación de un certificado de reconocimiento INEN a 293 subpartidas de importación, entre las cuales se encuentran juguetes, alimentos, cosméticos y alrededor de 56 ítems que son bienes de capital. “Queremos sustituir importaciones, pero hagámoslo de manera organizada y consensuada”, señaló Henry Kronfle, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil (CIG) y del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE).

La resolución 116 en el primer mes del año causó  la disminución del 56% de importaciones.Por ejemplo, uno de los varios puntos que preocupan al empresariado es que no hubo un estudio del desdoblamiento de las partidas “bolsa”, en el que se incluye el barniz con que se recubren las latas de alimentos  y que no es un bien de consumo, sino  una materia prima.

La Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor) también puso reparos en tal sentido, por lo que solicitó al Ministerio de Industrias y Productividad (Mipro) que se trabaje en una reforma y se eliminen los insumos que, según Kronfle, son el 80% de las importaciones del país.

Felipe Rivadeneira, titular de Fedexpor, dijo hace varias semanas que el atunero es uno de los sectores donde existe mayor preocupación por el tema del barniz, aunque por el momento no se puede hablar de disminución de exportaciones.

Estos gremios empresariales pidieron que se  reforme el documento con el objetivo de que se eliminen las materias primas, y ante lo cual, el ministro Ramiro González, indicó que estaban liberadas, pero que se descartaba dar marcha atrás con  el proceso de sustitución de importaciones.

El principal del CEE  no tuvo reparo al decir, en entrevista con este diario, que “no sabemos si  el Presidente sabe los problemas que tenemos”.

La 116  ya provocó la reducción de $ 85 millones  en importaciones en enero (el año pasado fueron $ 130 millones), según datos del Servicio Nacional de Aduanas (Senae); pero también generó inconvenientes a  los  empresarios que no han desaduanizado sus mercaderías, aun cuando se han firmado 84 acuerdos con más de 400 empresas,  bajo  el compromiso mutuo de liberar mercaderías e incrementar la producción local.

Solo el sector cosmético, a medidados de enero, acordó un aumento de $ 52 millones, adicionales a los $ 10 millones que producen actualmente.

Industria local entusiasta

Pero el contrapeso de este proceso lo hacen otros  sectores de la industria local, como el de cerámica y  metalmecánico. “Lo que siempre pedimos es que se controle la importación de mala calidad”, señaló Andrés Robalino, vicepresidente de la Cámara de Industrias de Cuenca (CIC), quien expresó que los segmentos de  cerámica (plana y vajillas), de confección y electrodomésticos, se han visto afectados por la entrada de productos a precios bajos y que no cumplen los estándares, como el etiquetado.   

De ahí que la revisión a reglamentos técnicos, como el 033 para productos cerámicos, por parte del Instituto Ecuatoriano de Normalización (INEN), haya causado agitación.

Gustavo Palacios, vicepresidente de la compañía Kerámicos, expresó que tales normas son las que garantizan al consumidor que el producto sea de buena calidad. Esta exige una rotulación diferenciada  según su uso y parámetros en cuanto a espesor, entre otros.

La importación -añadió- creció abruptamente, con la entrada de un  millón de metros cuadrados por mes y con un consumo interno de dos millones.

En tanto, la industria metalmecánica, con una producción actual de entre 850.000 y 900.000 toneladas, también se ha mostrado interesada en la sustitución selectiva de importaciones y en el cambio de matriz productiva.

Según Guillermo Pavón, titular de la Federación Ecuatoriana de la Industria de Metal (Fedimetal), hay optimismo ya que el sector ha buscado en las diversas instancias del Gobierno un acercamiento que les permita desarrollar y que las fábricas están prestas a aumentar su productividad.

Desde la perspectiva del mercado, uno de los voceros de la Corporación Favorita -propietario de las cadenas Supermaxi y Akí-, mencionó que tras la firma de acuerdos con el Mipro tienen un compromiso que va más allá para dar las facilidades para comercializar productos elaborados en Ecuador, “siempre que cumplan con los estándares de calidad, rotulación y demás formalismos legales”.

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Noticias relacionadas

En 40 años de relaciones bilaterales, China se ha convertido en un mercado clave para las exportaciones de Ecuador y es el octavo país de origen de la inversión extranjera. Las últimas alianzas entre ambos gobiernos se han concretado para formar parte de la Nueva Ruta de la Seda y del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura.

Social media