Volker Finke: El DT meticuloso que pretende ‘refundar’ el fútbol camerunés
El alemán Volker Finke lideró por 16 años al Friburgo (1991-2007), un equipo chico y de bajo presupuesto en el balompié germano. La clave de su éxito en ese club fue priorizar el funcionamiento colectivo, de manera que las figuras se potencien y saquen a relucir sus mejores características.
Bajo esa premisa, lo ascendió a la Bundesliga por primera vez en la temporada 1993-1994 y lo llevó años más tarde a 2 participaciones en la Copa UEFA.
Su inclinación por alinear a jugadores bien dotados físicamente e inteligentes en el traslado del balón, llamó la atención y generó confianza entre los dirigentes de la Federación Camerunesa de Fútbol, quienes lo eligieron en mayo del año pasado para que lidere a los ‘leones indomables’ en el séptimo Campeonato Mundial de su historia deportiva.
En el combinado africano encontró potencia y velocidad, sumados a la eficacia y calidad técnica del delantero del Chelsea inglés Samuel Eto’o, figura excluyente del equipo. Camerún superó en noviembre a Túnez en la eliminatoria directa y llegó a la cita de Brasil.
Gracias a la presencia de Finke en el banquillo, Eto’o volvió al seleccionado en octubre pasado, tras su renuncia un mes antes aduciendo mala organización de la Federación Camerunesa.
El adiestrador nacido en Nienburg hace 66 años sabe del potencial que tiene la nación subsahariana, colectiva e individualmente, y lo demostrará en el Grupo A que completan Brasil, Croacia y México.
“En toda escuadra hay jugadores que marcan la diferencia. Para nosotros, Samuel es uno de ellos. Pero además contamos con Alexandre Song en el mediocampo y Nicolas N’Koulou y Aurélien Chedjou en la zona defensiva, que son los otros 3 jugadores que configuran la espina dorsal de nuestro bloque”, mencionó el estratega europeo en una entrevista con el portal de la FIFA.
Pero el mayor reto que se le presentará al germano, en su primera participación como técnico en la máxima cita futbolística, es devolverle la gloria que tuvo el fútbol de ese país en el Mundial de Italia 1990, cuando avanzó a los cuartos de final de la mano del centroatacante Roger Milla.
Ahora esa posta la tomó Eto’o, quien se ganó el aprecio y respaldo de Finke. “Samuel es un jugador de talla mundial. El hecho de que él juegue es importante para la calidad del combinado”, agregó en el portal Fifa.com.
En las últimas 4 apariciones mundialistas, Camerún no superó la fase de grupos. Para romper esa ‘maldición’, Volker Finke cuenta con un plantel luchador y con buen dominio de balón. Estas características, sumadas a su precisión y meticulosidad para dirigir, mostrarán un juego fresco que puede sorprender en la 20ª Copa del Mundo.
En su paso por el Friburgo, siempre alentó a sus volantes para que contribuyan en ofensiva. Su idea es que la tarea goleadora no recaiga exclusivamente en los delanteros. Camerún tiene los hombres exactos para esta labor. Song y Jean Makoun han demostrado polifuncionalidad dentro de la cancha y su apoyo puede resultar valioso cuando el arco no se les abra a los arietes.
Los juegos amistosos contra Paraguay en mayo y Alemania en junio serán un ‘termómetro’ para conocer el verdadero potencial que puedan mostrar Finke y sus dirigidos en el Mundial brasileño; aunque en la mente de todos siga fresca la goleada 5-1 que les propinó Portugal el 5 de marzo.
A pesar de que no podrá sorprender a sus rivales con sus tácticas revolucionarias, como lo hacía en sus primeros años en el Friburgo a inicios de la década del 90, los 20 millones de cameruneses, apasionados por el fútbol, pueden estar tranquilos de que Volker Finke sabe lo que hace y las decisiones que toma.