La experiencia cubana pule el boxeo de Guayas (GALERÍA)

Elidian Estrada Follo, oriundo del Pinar del Río (Cuba), es el jefe técnico de la Asociación de Box del Guayas. Llegó al país en 2004 para dirigir a boxeadores de distintas provincias y desde hace un año y cuatro meses se radicó en Guayaquil. Todos los días supervisa el entrenamiento de unos 50 jóvenes -cuyas edades van desde los 11 años- que practican en el coliseo César Salazar, en el suroeste de la ciudad.

El experto cubano supervisa -además- los trabajos que realizan los entrenadores nacionales que están a cargo del grupo.

Kéder Pachito es uno de ellos. Tiene más de 20 años de experiencia y revela que una de las diferencias entre la metodología ecuatoriana y la cubana radica en el estilo de pelea. Los púgiles cubanos son más defensivos, más técnicos, saben manejar el combate hasta el final. “Para eso se necesita disciplina y un excelente estado físico”, explica.

Elidian Estrada comparte ese criterio. Admite que aunque los boxeadores nacionales tienen el biotipo perfecto para ganar títulos internacionales, les falta más concentración y tranquilidad en el ring.

Según Estrada, el boxeador ecuatoriano quiere terminar las peleas muy rápido y por eso busca noquear a su rival apenas suena la campana. El estilo cubano marca el contraste. Los boxeadores formados bajo esa metodología estudian a su rival, se cuidan de no recibir golpes que les resten puntos, llevan el combate hasta el final y, si es necesario, esperan la decisión de los jueces.

El boxeo de la provincia se nutre de esta experiencia. Santos Vásquez, presidente de la Asociación de Boxeo del Guayas, aseguró que el pugilato ‘albiceleste’ logró en 2013 lo que no pudo alcanzar en una década. El año pasado obtuvo siete campeonatos y dos vicecampeonatos nacionales bajo la dirección de los profesores cubanos, un hecho inédito, según el titular de la Asobox.

¿Pero cuál es el aporte de la experiencia al box del Guayas? Estrada Follo destacó que la enseñanza del deporte -desde la perspectiva de su país- reposa en dos pilares fundamentales: la concentración y la disciplina. Esos criterios han sido adoptados con eficacia por los deportistas y los entrenadores nacionales.

La concentración a la que se refiere no se limita solo al combate, sino también a su contexto (entrenamientos, conocimiento del rival y balance de la pelea). “El deporte en Cuba se convierte en el trabajo de cualquier atleta, es decir, su dedicación a los entrenamientos es constante, se concentra ciento por ciento en entrenar, estudiar, competir y mejorar sus marcas. Cuando tiene libre va donde su familia y luego regresa”, añade.

Guayas empezó a implementar esa experiencia el año pasado. Según Pachito, se realizaron varias concentraciones de 21 días, donde los púgiles se entrenaron y se alimentaron correctamente, como hacen los deportistas de alto rendimiento.

Estrada considera que el tipo de preparación de los entrenadores debe ser similar al del sistema educativo; es decir, mantener un régimen de práctica y teoría constante, tal como sucede en su país, donde los entrenadores son profesionales del deporte, con títulos académicos.

Frank López Gil (entrenador cubano), quien conoce el box ecuatoriano desde hace 12 años, también opina que el trabajo con los entrenadores es clave en todo el proceso de entrenamiento.

López reveló que, cuando llegó al país, el nivel técnico de los entrenadores y boxeadores era bajo. Junto al profesor Estrada trazaron un plan de trabajo, que fue socializado con la asociación provincial y que principalmente se enfocó en preparar a entrenadores. “Sábado a sábado, domingo a domingo, a través de charlas, cursos y seminarios, estamos trabajando con entrenadores de la asociación, de los municipios y de los clubes; es importante que se preparen”, resalta.

Las competencias elevan el nivel de los boxeadores

Para Estrada Follo, la cantidad de torneos -en todas las categorías- en este proceso deportivo impulsado por el Ministerio del Deporte permite que los boxeadores ganen experiencia y eleven su nivel.

Antes de la implementación del nuevo cronograma de torneos, los boxeadores competían cada cuatro años. Esto, según Estrada, “mataba el deporte”, pero actualmente, hay competencias todos los meses del año -en todas las categorías- y se presta atención a todos los niveles. Así, el boxeo va en progreso.

Datos

En la escuela de boxeo los púgiles ensayan movimientos típicos del deporte, como golpes, movimiento de piernas y posición de defensa, en coordinación con el entrenador.

Sombra sin guantes es otro de los ejercicios que componen la práctica. Es la simulación de un combate mirando sus movimientos y perfeccionando la técnica.

El trabajo con aparato consiste en que el púgil practica con el entrenador dando golpes específicos a las guanteletas y al saco de boxeo.

Finalmente, sin guantes, se realiza el trabajo con la cuerda (saltar).