La crisis, aún sin soluciones claras
Las dificultades económicas que atravesaron los equipos ecuatorianos en la primera etapa no avizoran una solución inmediata. Por el contrario, la crisis se agravaría, ya que los dirigentes no tienen alternativas claras para financiar el déficit existente, ni los próximos pagos que se generan por sueldos y obligaciones tributarias.
“Estamos gestionando y buscando alternativas que solventen lo que pensábamos conseguir si firmábamos con Mónaco, pero no hay aún nada concreto”, ha referido en constantes ocasiones el presidente de El Nacional, Hugo Villacís.
Por eso no hay una fecha tentativa para el pago de uno de los cuatro meses que se adeuda a los jugadores, cuerpo técnico de primera categoría, reserva y divisiones menores.
El déficit mencionado por la dirigencia asciende a los 4 millones de dólares y por eso no son sujetos de crédito directo por instituciones bancarias.
Por ello su única opción es esperar que los “intereses” que clubes del exterior tendrían por dos futbolistas más (Édison Preciado y Marwin Pita) se concreten.
“La venta de los jugadores sería una buena alternativa para los problemas financieros, pero al momento no hay nada real”, indicó el gerente deportivo Iván Vásconez.
El otro club quiteño con “líos” financieros es Deportivo Quito, conjunto que también tendría un déficit aproximado de 4 millones de dólares. La gestión que el actual presidente realizó hace casi dos meses en Suiza no tuvo resultado, por eso no se ha acercado a conversar personalmente con la plantilla de jugadores.
También son cuatro meses en unos casos, y en otros hasta ocho, los que les deben a los futbolistas. La dirigencia al momento no ha recibido ofertas por ningún jugador, aunque se mencionó que podría negociarse al volante Álex Colón, lo que generaría una inyección económica que solo sería significativa si se lo vende, puesto que un préstamo no llegaría ni a los 450 mil dólares, rubro que se requiere mensualmente para cubrir los salarios de los jugadores.
Para este lunes fueron convocados exdirigentes y los actuales a una reunión que se desarrollará en el Colegio de Ingenieros Civiles de Pichincha al norte de Quito. La otra opción que esperan es que se puedan sumar para esta última fase nuevos auspiciantes, aunque los presupuestos anuales en un 70% ya están financiados, pero no alcanzan para cubrir el déficit.