La dirigencia del Deportivo Quito tiene dos opciones para reforzar la defensa y ocupar la posición que deja vacante Jairo Campos, quien no renovó su contrato para esta temporada y será anunciado hoy entre los refuerzos de Barcelona para el presente año.

La primera alternativa es contratar a un extranjero, chileno o argentino. Pero para eso necesitan nacionalizar a uno de los cuatro foráneos que militará en el club en esta temporada.

El presidente Fernando Mantilla cree  probable la pronta naturalización  del atacante argentino Luis Miguel Escalada. “Podríamos lograr que él sea un ecuatoriano más, porque sus trámites están bastante avanzados y eso nos ayudaría a resolver este dilema”, adujo Mantilla.

Pero de no darse esa posibilidad buscarían el retorno del ecuatoriano Giovanny Espinoza (34 años) y ex seleccionado, quien milita actualmente en el Unión Española de Chile.

El conjunto de la “Plaza del Teatro” comenzará sus trabajos este lunes en Carcelén y al día siguiente se trasladará hasta Ibarra, capital de la provincia de Imbabura, donde cumplirá una semana de trabajo antes de que inicie  el torneo local.