Hace seis años la vida del boyacense Freddy Montaña, vencedor de la última edición de la Vuelta Ciclística Internacional al Ecuador, cambió por completo.    

Un accidente en el sector de Marche (Italia), mientras entrenaba, lo dejó sumido durante tres días en la habitación de un hospital con un coma profundo, tras ser diagnosticado con un trauma craneoencefálico.  

Esos momentos prácticamente no constan en la memoria del ciclista, que el próximo 23 de este mes cumplirá 31 años.

Son muy vagos los instantes que recuerda, salvo que se dirigía a un restaurante para poder desayunar y por esa razón no portaba su casco. Iba por avenidas italianas poco transitadas y fue la camioneta de “Marche Team”, divisa que defendió, la que le propinó el golpe, tras sobrepasar una señal de “pare”.

El suceso ocurrió el 7 de mayo de 2007. Los médicos no le daban mayor expectativa de volver al deporte. Al contrario, para ellos el que Montaña regresara a pedalear era casi una utopía, aunque nunca lo reconocieron cuando él les consultó.

Desde 2012 es el capitán del Movistar Team y es compañero del ecuatoriano Byron GuamáEn varias entrevistas que el boyacense concedió en su natal Colombia, después del accidente, reconoció que era una  incertidumbre para él saber con exactitud en qué condiciones quedaría. “El gran golpe para mí fue cuando me subí a una bicicleta y me caí; no tenía equilibrio. Ese día lloré y le pedí a Dios que me ayudara, porque no me veía haciendo otra cosa”.

En los seis  meses siguientes al accidente y tras retornar a su país tuvo que apoyarse en su progenitor para poder efectuar las tareas cotidianas. Después le tomó un tiempo similar aprender nuevamente a treparse y dirigir una bicicleta.

Para el 2008 volvió a la actividad ciclística como integrante del equipo auspiciado por la  Lotería de Boyacá. Esa temporada la tomó como preparación y a la siguiente volvió a figurar entre los grandes de su país.

Fue vicecampeón en la Vuelta a Colombia (2009). Ganó la cronoescalada y la general de la Clásica a Boyacá. Además fue segundo en la Vuelta a Castilla y León (España). Alcanzó la quinta posición en la Clásica a Antioquia en Colombia.

Todos esos logros le brindaron mayor seguridad para emprender nuevos retos. Aún hoy, y pese a la experiencia acumulada como integrante de Movistar Team Continental, presenta cierto temor cada vez que inicia una prueba.

Se encomienda a Dios para que le proteja de posibles caídas y le permita terminar con éxito cada etapa rutera en la que se inscribe.

Desde el 2012 es el capitán del Movistar Team y es compañero del ecuatoriano Byron Guamá, quien lo define como una persona tranquila y solidaria. “Al igual que todos en el equipo, siempre está pendiente del resto. En lo personal lo he visto en plenitud de condiciones y es un justo vencedor”, contó Guamá.

Precisamente el respaldo de los integrantes de ese plantel se ha convertido en la mayor fortaleza de Freddy, quien tiene un ángel guardián en el cielo, ya que el mismo año del accidente falleció su madre.

Su especialidad siempre fue los tramos de altura, aunque en Ecuador no estuvo en los primeros lugares en esta modalidad.

Montaña al momento está casado con Gina y tiene una pequeña niña de 10 meses llamada Dana.

DATOS

A raíz del accidente hizo una promesa al “Señor de los Milagros”: si lo recuperaba y le permitía volver a las competencias, regresaría en bicicleta al lugar en el que se mostró a sus devotos.

El Santo en mención se apareció en el lago Tota (a 7 kilómetros de su casa). Hasta allá fue y ascendió los 3.000 m de altura y luego retornó a su domicilio.

Dos años transcurrieron desde el accidente que Montaña tuvo en Italia hasta lograr el podio en la Vuelta a Colombia.

Cuando se le bajan las pulsaciones o la presión sanguínea suele tener dolores de cabeza fuertes y algo de inestabilidad.

Montaña admira a su compatriota Santiago Botero, quien participó en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y Beijing 2008.