El Peñarol uruguayo jugará hoy (19:50)  frente al Vélez Sarsfield argentino, el que será -quizá- su partido más importante en más de un cuarto de siglo y que ofrece al ganador de esta eliminatoria una plaza en la final de la Copa Libertadores.

Ganar o ganar y, de ser posible, sin recibir goles, es la consigna del “Manya”, como es conocido el equipo que ya ganó la Copa Libertadores en las ediciones de 1960, 1961, 1966, 1982 y 1987.  El primer ganador de la Libertadores no llegaba a las semifinales desde hace 24 años, cuando finalmente se alzó con el título a expensas del América colombiano.

“Todos estamos muy ilusionados y con muchas ganas de seguir avanzando”, afirmó el entrenador del Peñarol, Diego Aguirre (foto), quien marcó el agónico gol que dio la victoria y el título al equipo uruguayo en la final de 1987 frente al América.

Era el tercer partido de la final con el equipo rojo de Cali, el del desempate jugado en Santiago de Chile. Aguirre, quien enfrentará en las semifinales a un colega que era el goleador del América colombiano, el argentino Ricardo Gareca, enfatizó que el rival será “muy duro, difícil”.