“No, no me llevo con mi ex”, es la respuesta que la mayoría de personas da cuando les preguntan si mantienen una amistad con sus anteriores parejas. Algunas, si se encuentran, solo saludan cordialmente, otras aplican la frase “si te vi, no me acuerdo”.

“Qué vamos a poder llevarnos, es más, si lo encuentro en la calle, lo más seguro es que yo reaccione mal”, dice Dolores Égüez y comenta que su pareja nunca se atrevió a terminar la relación, simplemente desapareció.

Su última relación amorosa duró cerca de un año y en ella perduraron actitudes machistas por parte de su pareja. “Mi irreverencia e independencia era lo que menos le agradaban de mi personalidad. Esto hizo que no tengamos espacios en común y la relación se acabó”, menciona Égüez.

Muy pocas parejas mantienen una amistad después de haberse separado. Ese es el caso de Geovana Urbano quien trabaja con un ex. “Todo es cuestión de ser tolerantes y, en mi caso, profesionales. He trabajado con mi ex por 4 años y somos muy buenos amigos, es más, me llevo muy bien con su novia. Creo que la fiesta se lleva en paz si rescatas las cosas buenas de las relaciones y superas lo que no pudo ser”, dice Urbano.

Después de un año y medio de relación, decidieron separarse debido a una traición. Al principio no  les fue fácil volver a ser amigos, con el tiempo los sentimientos desaparecieron y hoy solo conservan los buenos recuerdos. 

Para ambas, ser amigos o no de las ex parejas depende de cómo haya terminado la relación, además, de la amistad y compañerismo que hayan construido durante el tiempo que estuvieron juntos. 

Según la psicóloga Cecilia Castelnuovo, se puede mantener una amistad mientras los límites estén bien establecidos y si los 2 se sienten cómodos. “Retrotraer a una situación de no pareja cuando se avanzó en un estilo de relación, es difícil, implica mucho respeto, claridad e implica poder manejar esos niveles que hubo de intimidad y volver a una mayor distancia”, explica Castelnuovo.

Varios sitios web dan recomendaciones para tener una amistad con tu ex, como las del portal www.rizaldos.com que aconseja que la paciencia es fundamental para lograr ser amigo o amiga de tu ex, además, aclara que el duelo del rompimiento tarda entre 6 meses a 2 años, tiempo en que deberían alejarse.

Poner distancia para cicatrizar heridas, no tener relaciones sexuales para no causar confusiones, y si hay amor aún no puede haber amistad son otras de las recomendaciones. Pero para Castelnuovo no hay una receta, depende de lo que quiera cada uno. Asegura que se podría mantener una relación amistosa con otro nivel de afectividad y de intimidad si la relación previa de pareja estuvo bien manejada y bien resuelta, pero si quedaron muchos conflictos pendientes no se puede plantear la idea de una amistad. 

De ahí que lo que está en discusión es el cómo y la razón del fin de la relación. El cómo terminaron está directamente relacionado con el cómo construyeron el noviazgo. Si faltó respeto, transparencia y honestidad, obviamente el traicionado se va a sentir resentido, y pretender —dice la especialista— ser amigos después de un rompimiento de una relación que vino mal y terminó mal, “es un absurdo”.

“No sean resentidos, ya supérenlo”, es lo que muchos aconsejan a la pareja para que vuelva a entablar una amistad, con pretexto de ser civilizados y maduros. “Por qué y para qué tener una amistad. Uno debe aprender a respetar al otro pero primero debe respetarse a sí mismo, forzar una relación porque alguien dijo que hay que llevarse con el ex no tiene sentido”, dice Castelnuovo y agrega que si uno de los dos no quiere mantener una amistad porque le hace daño o le incomoda, el otro debe respetar esta decisión.

El hecho de que no quiera no significa que haya sentimientos de amor de por medio, pueda que haya otro tipo de sentimientos como enojo porque las heridas están abiertas o simplemente una de las partes hizo un balance final negativo de lo que fue la relación lo que le impulsa a alejarse por completo de su ex. Si no les hace bien a los 2, la recomendación es que no haya amistad y que mantengan la distancia.

“Donde hubo fuego, cenizas quedan”, para Castelnuovo esto no es cierto.

Si vuelves a tener una amistad con tu ex  —comenta— no es que los sentimientos vuelven a nacer, los vínculos se construyen, depende de ambos si quieren una relación de amistad o de pareja. “Las viejas relaciones pueden reanudarse si los elementos que generaron el distanciamiento se modifican y si se vuelven a enamorar”, dice.

Sin embargo, la situación es diferente si hay hijos de por medio. Édgar Reyna, terapeuta familia de Servi Terapias, recomienda que no queden de amigos ni de enemigos, sino que mantengan una relación cordial.

El primer paso es sanar las heridas y procesar la pérdida. Después se deben establecer límites, acuerdos y reglas básicas con respecto a los niños, a la economía, etc.

“No es saludable que mantengan una amistad las parejas separadas porque podrían crear expectativas en los niños sobre una posible reconciliación, les crean falsas esperanzas”, dice Reyna. (VEC)