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“No quería que pareciera aplastar botones al azar”

“No quería que pareciera aplastar botones al azar”
18 de noviembre de 2013 - 00:00

Ya se sabía que para la producción de Europa Report el equipo de producción, encabezado por el director ecuatoriano Sebastián Cordero, se había asesorado con expertos para crear una película con una alta fidelidad científica.

“El hecho de que el objetivo final sea guardar y proteger las imágenes y transmitirlas es un poco la esencia de la película”.
Sebastián Cordero
Director

Ello es evidente en los escenarios que recrean una más que creíble nave espacial, en la que un grupo de astronautas viaja hacia Europa -la más grande de las lunas de Júpiter- en busca de rastros de agua y vida.

Sin embargo, el asunto ha sido más que una mera obsesión. Muchísimos detalles fueron cuidados en extremo para lograr que esta película adquiriera esa característica de documental que le ha dado una narrativa que se vale de no ser convencional para tomar fuerza como relato.

La noche del sábado, en Multicines de Milenium Plaza (Cuenca), se realizó una segunda proyección de Europa Report en el marco del Festival de Cine La Orquídea, luego de que el filme fuera exhibido el viernes como película inaugural.

Este segunda exhibición se produjo luego de que en la noche de la inauguración la película fuera proyectada en formato DVD y no en el original en DCP, formato que reproduce a 48 cuadros por segundo.

Fue también la ocasión para que el ecuatoriano Enrique Chediak (director de fotografía), el español Eugenio Caballero (diseñador de producción) y la rumana Anamaría Marinca (actriz), acompañaran a Cordero para explicar al detalle cómo fue el trabajo de producción de la primera cinta de temática espacial que dirige un ecuatoriano.

La película fue rodada con 8 cámaras distintas, que grabaron todas las escenas de manera simultánea.

Algunas de ellas estaban colocadas en el set de forma que parecieran las cámaras que normalmente registran la actividad al interior de la nave.

Aquello suponía un reto, explicó Chediak. A diferencia de los filmes de astronautas, donde a los actores les colocan luces que les iluminan directamente las caras, en Europa Report se utilizaron diversas pantallas LED -comerciales, no de cine, especificó el director de fotografía-, cuyas posiciones eran modificadas mediante control remoto para cambiar las condiciones de la luz lo más rápido posible.

“El tiempo de rodaje fue de 18 días, nada más”, dijo Chediak. Por ello, explicó: “Teníamos que estar súper preparados en todo”.

Con el tiempo en contra, muy corto para un filme de este tipo, la preproducción jugó un papel clave.

“Brower es un personaje fascinante que ayudó a construir los controles y nos dio información imprescindible”.
Eugenio Caballero
Diseño de Producción

Mientras filmaban, Cordero y su equipo de producción monitoreaban simultáneamente el material que se iba produciendo en un panel con 8 pantallas distintas, lo que, a decir de Caballero, “influenció en el proceso de edición, porque teníamos muchos puntos de vista al mismo tiempo”.

“Si teníamos una duda, repetíamos la escena”, dijo el director, que con Chediak habían acordado que revisar una por una 8 tomas distintas de una misma situación era absurdo, pues más rápido era repetirlas que revisarlas.

De modo que plantearon un proceso de trabajo. “Teníamos mucho ensayo de puesta en escena con los actores, y una vez que ya se definía bien, era súper rápido, porque el trabajo era de golpe con todos los ángulos”, indicó Cordero.

La licencia fue, al fin y al cabo, realizar el trabajo con los actores de la misma forma en que se hace en una obra de teatro.

Otra licencia en el rodaje fue que, si bien existía un afán por mantener un apego obsesivo a la realidad, Chediak comentó que las cámaras incorporadas a los trajes, que los astronautas de verdad llevan en la parte superior de la cabeza, fueron colocadas a un lado del casco en las escenas que representaban los exteriores de la nave, creando así una especie de plano overshoulder, porque de la otra forma se veía absolutamente impersonal y el efecto habría sido mediocre.

Larga preparación
A diferencia del corto tiempo del rodaje, los actores tuvieron un período más largo que de costumbre para prepararse. “Yo tenía mucho miedo de que a nivel actoral pareciera que los personajes aplastaban botones al azar”, dijo Cordero, una preocupación que se justifica con fuerza cuando el objetivo es que la cinta luzca como un documental.

Marinca, presente en el conversatorio, se refirió a la importancia de la colaboración de Steven Brower, un escenógrafo apasionado por el tema de los viajes espaciales, que llegó para asesorar a Caballero en el diseño de la producción.

“Necesitábamos alguien actualizado”, expresó Caballero, que define a Brower como “un personaje fascinante que dio información imprescindible para los actores”.

El rol de Brower fue más allá. Cordero y Caballero llegaron a pelearse por su tiempo, porque de pronto el director empezó a requerirlo para que adiestrara a los actores, enseñándoles qué es lo que hace exactamente un astronauta en un viaje por el espacio.

“Queríamos que supieran los procedimientos específicos, tanto de rutina como de emergencia. Sentía que con eso funcionaría mejor la actuación”, comentó Cordero, que además proporcionó a los actores un libro que explica cómo es la vida en el espacio y les hizo ver una serie de películas, entre las que destaca el documental For all mankind(1989), que, junto a 2001: Odisea espacial(1968) y Solaris(1968).

“Con mayor tiempo en el ensayo -dijo Marinca- pude leer e investigar más, pero el trabajo del actor es darle vida al personaje”.

Por ello, para darle volumen a los astronautas a los que interpretaban, los actores fueron haciéndose ideas, pensando en qué objetos llevarían a una misión espacial, e ideando metáforas que entraran en relación con su papel.

Y la metáfora de Marinca fue un cuadro: Paisaje con la caída de Ícaro, óleo pintado por Pietr Brueghel en 1555, donde pasan muchísimas cosas, mientras Ícaro, personaje mitológico, aparece cayendo luego de que las alas que se hizo con plumas y cera se derritieran por la acción del Sol mientras volaba.

“Tiene que ver con el peligro que entraña acercarse al conocimiento”, explicó Cordero. Marinca agregó otro punto de vista: “Hay algo de la culpa de enfrentar a los dioses”.

Y es que, al ir en busca del saber -que es poder-, los tripulantes de la nave se arriesgan y deben enfrentar más de una emergencia mientras llegan a Europa, en ocasiones preocupándose más porque el conocimiento llegue a la Tierra que por mantenerse a salvo. “El hecho de que el objetivo final sea guardar y proteger las imágenes y transmitirlas es un poco la esencia de la película”, manifestó Cordero.

Datos

Europa Reportse estrenó en Ecuador durante la inauguración de La Orquídea. En dos semanas estará en carteleras de salas de cine comercial a nivel nacional.

Además de Anamaría Marinca, el reparto de Europa Report -filme con elenco coral, según su director- lo componen: Christian Camargo, Embeth Davidtz, Michael Nyqvist, Daniel Wu, Karolina Wydra, Sharlto Copley, Dan Fogler e Isiah Whitlock Jr.

El Festival de Cine La Orquídea continuará hasta el viernes, día en que se premiará a los ganadores. Las entradas a las proyecciones son gratuitas y la cartelera se puede ver en festivalcineorquidea.com.

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