Irma Herrera: "El cine no es exclusivo de un género"
La película Odisea de un Sueño, dirigida en 2013 por Irma Herrera, narra la travesía de migrantes ecuatorianos que quieren llegar a Estados Unidos. La cineasta guayasense también dirigió el documental De Boca de los Sapos a El Triunfo, sobre la historia de su cantón y en el cual los personajes principales son las vendedoras de hornado, aves de corral, legumbres y abarrotes, entre toda la comunidad.
Durante el cuarto festival Ecuador Bajo Tierra (EBT4), que se dio la semana pasada en el cine Ochoymedio de Quito, la cineasta presentó sus obras junto con Jéssica Benavides Chila, una de sus colaboradoras habituales y quien tiene un papel en el filme de no ficción que presentaron en la capital, el pasado jueves 8 de diciembre.
El rodaje de De Boca de los Sapos... tuvo una duración de 3 años, desde la búsqueda de locaciones. Antes de eso, el equipo de Irma Herrera Producciones había estrenado la primera película rodada en El Triunfo, Odisea..., cuya producción duró 7 años. “Cuando algo se me mete en la cabeza es más fácil que me la arranquen a que me saquen la idea”, dice la cineasta, quien ahorró $ 20 mil para su filme de ficción —“basado en hechos reales”, según la directora—, el cual tiene como escenario un desierto fronterizo y, como vehículos, un puñado de cuadrones.
Los actores, quienes se presentaron a un casting, al que le siguió un taller de teatro, colaboraron sin recibir retribuciones que no fueran la alimentación y la movilización. El cine de guerrilla es una labor colectiva que ya tiene otros exponentes reconocibles, como Nixon Chalacamá, José Cuesta o Fernando Cedeño.
Herrera tiene una licenciatura en Ciencias de la Educación, pero mantiene una juguetería junto con su esposo, Robert Zambrano, en el cantón guayasense de El Triunfo, donde organizó un encuentro de cineastas que recibió la visita de varios exponentes manabitas.
“Si un día, mientras se rueda una película, toca dormir en el suelo o cocinar en grupo, pues lo hacemos. Una sola golondrina no hace un verano”, les explicó Irma a los espectadores de sus filmes, en una sala del Ochoymedio.
La ‘licenciada’, como la conocen, está convencida de que el cine de guerrilla dejó de ser una cuestión de hombres hace mucho tiempo. “Aunque este país es un patriarcado —dijo en una entrevista hecha por Ochoymedio—, donde el hombre es el que ‘manda’, el cine de bajo, alto o mediano presupuesto no es exclusivo de ningún género. Es territorio de quien tenga la posición de hacerlo, de llevar su mensaje o su forma de ver la vida o la realidad de otro”.
Mientras continúa con su producción fílmica, Irma Herrera tampoco descarta la autoformación. Estudia en una escuela de formación de actores, un oficio en el cual —admite— el aprendizaje nunca termina. La directora costeña prefiere producir antes que tomar una cámara y enumera los planos que escoge durante los rodajes.
El trabajo tras su primer documental es consistente, incluye una investigación histórica y el relato de un contexto al que no le falta rigor periodístico. “Esto es mi sueño”, reitera Irma, “para que cuando muera, en mi cantón no vaya a pasar inadvertida, como pionera del cine, el cual se hace por quienes tienen el amor de hacerlo, sin impedimentos ni obstáculos”.
La directora llevaba unos guantes mientras visitó Quito, el frío es algo a lo que no está habituada, pero le planta cara, sin vacilar. Ahora tiene en mente otro largometraje, también basado en hechos reales, el cual se rodaría en marzo de 2017. Para su producción, Irma Herrera quiere traer una filmadora de Estados Unidos, debido a que sus anteriores cámaras se han deteriorado con el uso y la importación es una forma de ahorrar.
El filme Fantasía de Rita, por ejemplo, fue el resultado de una cámara casera, de la marca Sony, que usaba casetes y frente a cuyo lente se plantaron decenas de niños y jóvenes, mientras la cineasta ensayaba y repetía las escenas.
El Triunfo como destino y territorio
El cantón del Guayas ya tiene su relato visual propio. Su historia empezó a forjarse durante la primera mitad del siglo XX, con la migración interna que recibía el caserío que, inicialmente, se llamó Boca de los Sapos. Boca por ser una de las desembocaduras del río Guayas en el océano Pacífico, y De los Sapos, por la gran cantidad de batracios que había entre su fauna. (I)
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Datos
Irma Herrera es licenciada en Ciencias de la Educación, comunicadora y cineasta costeña. Ha dirigido los filmes de ficción: Fantasía de Rita, Odisea de un Sueño; y el documental De Boca de los Sapos a El Triunfo.
La historia de El Triunfo (cantón de El Guayas) está documentada en la obra de la cineasta. Su producción duró 3 años y tuvo una inversión autogestionada de $ 10 mil.
El festival Ecuador Bajo Tierra inició hace 7 años, con la publicacipón del libro homónimo, cuyo subtítulo fue ‘Videografías en circulación paralela’. Se realiza en el Ochoymedio, en el barrio La Floresta.
La cuarta edición del certamen, dedicado al cine de guerrilla, y que fue del 7 al 11 de diciembre, se dio en Montecristi, Manta, Portoviejo y Quito. Se dieron 25 proyecciones y hubo cineforos con los cineastas y actores.
