Cuando una canción es bien lograda tiene garantizada permanencia continua, pasarán años desde su concepción y nunca perderá calidad, siempre sonará mejor, convirtiéndose en patrimonio de culto para los oyentes. En ese estado está ‘Noviembre negro’, el tema insignia de la banda guayaquileña de thrash metal Demolición.

Esa canción se ha convertido en la banda sonora que recuenta una atroz escena real del siglo pasado: la despiadada matanza obrera del 15 de noviembre de 1922 por parte de fuerzas armadas controladas por el Gobierno de la época.

Demolición, a sus 30 años, se niega a silenciarse, ahora vive su tercera era con cambios mejorados para bien y una renovada alineación.

Leonardo Piedra y Jaime Riofrío recuerdan que a finales de la década del 80, junto a los miembros fundadores de la banda, Fabricio López y Juan Pablo Martínez, abordaron la lectura de la novela narrativa Las cruces sobre el agua (1946), del escritor ecuatoriano Joaquín Gallegos Lara.

El argumento los impactó y ensamblaron el tema a su repertorio. La letra grita y arremete con violencia épica al compás del thrash metal que los identifica. En la actualidad la canción ha mutado en técnica, volviéndose progresiva, sin desvanecer la esencia concebida desde su etapa de creación.

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‘Noviembre negro’ forma parte de las cuatro estacas que cimientan la estructura de Demolición, junto a ‘Divino designio’, ‘Malicia’ y ‘Skinhead’. A este andamio difícil de demoler lo refuerzan ‘G.E.N.’, ‘Dulces sueños’ y ‘Cocaxicación’.

Esas temáticas abordan desconcertantes visiones sociales que en la actualidad no pierden vigencia, debido a la involución global que nos atrapa. Jaime, el vocalista, asegura que “...la banda se enfoca en la composición y descomposición de la estructura social y este análisis lo anexamos al plano contemporáneo”.

Leonardo cuenta que Demolición está componiendo nueva música: “Nuestra tendencia ha cambiado, hemos desarrollado en musicalidad y fuerza… además, hemos renovado las canciones de siempre, estas ya no suenan exactamente como las tocábamos desde un principio, en su época estaban bien, pero no ahora. Aunque nos parezca interesante lo hecho en el pasado, siempre estaremos en permanente actualización”.

Demolición ha trabajado sin detenerse y esta constancia se ha materializado en logros gratificantes. En agosto de 2013 fueron el preámbulo fuerte del cartel del QuitoFest ante una abrumadora audiencia superior a las 45.000 cabezas. En diciembre del mismo año participaron en el legendario festival de la Concha Acústica Villa Flora.

El Ministerio de Cultura y Patrimonio incluyó el tema ‘Noviembre negro’ en la ‘Colección de Antologías de Música Ecuatoriana Vol. 1’, un disco compilatorio que empaqueta la génesis del rock nacional.

En julio inauguraron su laboratorio musical insonorizado, un búnker hermético construido con sus manos, en donde se refugian para dedicarle calidad de tiempo ilimitado a la preproducción de las canciones que formarán parte de su tan esperado material discográfico.